Según ha revelado la prueba del guantelete, que consiste en identificar la existencia de nitratos y nitritos propios de un proyectil, el beniano Misael Nallar disparó un arma de fuego. Envuelto en el triple asesinato de dos sargentos y un miembro del Grupo de Apoyo Civil a la Policía (GACIP), el yerno del narcotraficante Einar Lima Lobo ha sido aprehendido el miércoles y aguarda la audiencia de medidas cautelares que se llevará adelante hoy, desde las 16:00.

El test del guantelete detecta los residuos que el proyectil disparado deja en las manos y también en la indumentaria de una persona. De esta manera, la Policía Boliviana ha concluido que Nallar ha activado un arma.

El comandante general de la Policía Boliviana, el general Jhonny Aguilera, confirmó el dato. "Encontramos en las manos derecha e izquierda, en ambas manos, la existencia de nitritos y nitratos, que son positivos a pólvora. Eso quiere decir que él ha actuado con un arma de fuego. A partir del estudio que hemos realizado en su humanidad, hemos logrado hallar diversidad de puntos". 

El jefe policial indicó también que dentro de un vehículo que se situaba en el inmueble de propiedad de Nallar evidenciaron dos cartuchos que corresponden al calibre de los 17 casquillos relacionados con el crimen de los sargentos Eustaquio Olano y Alfonso Chávez, y el voluntario del GACIP David Candia.

Además de Nallar, hay otros dos detenidos, entre ellos, un colombiano.

Esta tarde se concretará la audiencia de medidas cautelares de los sujetos, vinculados con el triple asesinato a sangre fría de los uniformados, que cayeron cuando patrullaban el martes de feriado, en el municipio de Porongo, en Santa Cruz.

Cabe recordar que los funcionarios estaban patrullando en la zona, cuando la camioneta se enfangó en arena. En el lugar, identificaron a un grupo de personas que circulaba en cuadratracks, mientras consumía alcohol y otras sustancias. Se trataba de Nallar y sus amigos.

El sargento Chávez le comunicó la situación al responsable de su unidad, quien se dirigió al lugar con un mecánico que logró sacar el vehículo de la arena. Sin embargo, los oficiales fueron interceptados por los presuntos guardaespaldas de Nallar, quienes los acribillaron con armas largas.

El hecho provocó luto nacional y se dio justamente en el mes en el que la Policía celebra su aniversario.