La Dirección de Competición de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) sancionó a Oriente Petrolero con la inhabilitación de que juegue como local en el estadio Ramón Aguilera Costas, hasta que el Tribunal de Disciplina "emita la resolución correspondiente", por los destrozos en el vestuario de los árbitros, que protagonizaron grupos vandálicos el domingo después del 1-1 frente a The Strongest.

Los jueces del cotejo denunciaron el robo de su dinero y pertenencias.

En la misiva, aseguran que los hechos están registrados en el informe del árbitro del match, el orureño Álvaro Campos, y del delegado del compromiso. Además, el hecho fue captado por medios de comunicación y existe una denuncia ante la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), agregan.

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La respuesta de la institución cruceña fue, en primera instancia, de repudio a los actos violentos y también cuestionaron una decisión del veedor del partido, José Luis Numberg. "Le pedimos un informe (acerca de) bajo qué criterios o circunstancia cambió del lugar habitual a los señores árbitros, sin notificación previa y expresa a la administración del evento".

Asimismo, indican que tomarán "las medidas correspondientes" para esclarecer lo sucedido y "dar con los responsables para que en lo posterior (esto) no vuelva a suceder".

Por su parte, la Asociación Boliviana de Árbitros de Fútbol (ABAF) ha pedido que los clubes cumplan con las normas de seguridad en los recintos deportivos.