El vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Restaurantes y Ramas Afines (Aserac), Tony Salazar, pidió una cuarentena rígida para Cochabamba por la ola de contagios, pero sujeta a que este rubro pueda comercializar sus productos a puerta cerrada a través de los deliverys.

"Son mil asociados a Aserac, de los cuales el 80% tienen deudas con entidades financieras, impuestos, AFPs, además de sus proveedores como agricultores lo cual repercute en despidos", manifestó Salazar en entrevista con Unitel.

Para el sector, trabajar unos días y descansar otros es “parchar” el problema de fondo, por esto piden a las autoridades que para una cuarentena rígida informen cómo será la distribución de alimentos e insumos básicos para el abastecimiento de la población.

Por otro lado, piden que se permita la circulación de la población hasta las 20 horas ya que hasta las 18 no funcionó y todos se abarrotan en los mercados y en el transporte público.