La firma de lencería Victoria's Secret se encuentra inmersa en una profunda transformación para dejar a un lado a esa mujer inalcanzable que ha sido imagen de la compañía desde su primer desfile mediático, celebrado en 1995. 

Era común que en su casting figuraran las modelos más reconocidas del momento. Resultar elegida para el show era el premio o la antesala de una carrera de éxito. Pero no todo era  color de rosa para las tops. Los testimonios de las 'exángeles' hablan de dietas draconianas a base de líquidos durante días para cumplir con las exigencias físicas de la presentación, a pesar de que las medidas de las participantes ya fueran de vértigo.

Claudia Schiffer, Eva Herzigová, Naomi Campbell, Isabeli Fontana, Irina Shayk, las hermanas Gigi y Bella Hadid, Alesandra Ambrosio, Miranda Kerr o Gisele Bundchen son solo algunas de las modelos convertidas en ángeles mortales con alas sobre la pasarela.

En 2019, la compañía anunció que el espectáculo televisado con el que presentaba sus nuevas colecciones –celebrado en diferentes enclaves mundiales se cancelaba de manera indefinida. Ya en 2018, tras unos datos de audiencia catastróficos, el mundo de la moda pudo intuir que cambios importantes estaban por llegar a la marca, algo que se acaba de confirmar la pasada semana.

Dos años después de anunciar el fin del desfile de ángeles tal y como se conocía, Victoria's Secret ha asegurado que se encuentra trabajando para hacer la firma más inclusiva y diversa. Para ello, la compañía estadounidense ha comunicado a través de una información en The New York Times que cuenta con un nuevo comité de asesoras, el VS Collective, que trabajará en ese cometido. Adiós a la fantasía y a las alas, las nuevas incorporaciones son siete mujeres que han destacado en diferentes ámbitos profesionales por sus logros.

Esta nueva comisión está conformada por la actriz india Priyanka Chopra; la futbolista profesional y capitana de la selección estadounidense, que ganó dos veces la Copa del Mundo de fútbol, Megan Rapinoe; la modelo transgénero Valentina Sampaio; la periodista Amanda de Cadenet; la top sudanesa Adut Akech; la modelo de talla grande Paloma Elsesser, reciente portada de Vogue; y la esquiadora Eileen Gu. 

El trabajo de las integrantes del comité no se limitará tan solo a aconsejar, también aparecerán en campañas publicitarias y promocionarán a la firma a través de sus cuentas en redes sociales, en las que suman millones de seguidores de todo el mundo.

"Estoy ilusionada y lista para asociarme con @VictoriasSecret como parte de #TheVSCollective - mujeres a las que admiro y que son íconos de nuestro tiempo. Tengo ganas de trabajar con ellas para mostrarles a TODAS las mujeres su belleza y poder individual y colectivo", escribió Rapinoe, de 35 años, en su cuenta de Twitter.

Martin Waters, director ejecutivo de Victoria's Secret desde el pasado mes de febrero, ha explicado el porqué de estos cambios: “Cuando el mundo estaba cambiando, fuimos muy lentos para ofrecer una respuesta. Teníamos que dejar de ser lo que los hombres deseaban para centrarnos en lo que las mujeres querían”. Lo ha reconocido en una breve entrevista con The New York Times en la que también ha añadido: “Sé que teníamos que haber hecho esto mucho antes, pero no teníamos las herramientas para conseguirlo”. A lo que también se refiere es a las novedades que ha vivido la firma en su estructura. La marca cuenta desde principios de este año con una nueva cúpula directiva en la que todos los cargos, a excepción de uno, están ocupados por mujeres, algo inédito hasta ahora.

El nuevo liderazgo de la empresa es consciente del cambio de mentalidad de la sociedad y también de la necesidad de adaptar su negocio al mundo de las redes sociales.

Mujeres de todas las edades buscan nuevas marcas con las que se puedan identificar mejor, firmas que les ofrezcan comodidad sin perder atractivo y que amplíen el espectro de    tallas. También demandan que no se cosifique el cuerpo femenino en los anuncios y que las modelos sean más diversas.

En este sentido, en los últimos tiempos han  aparecido marcas de lencería como ThirdLove, Negative, Cuup, Skims, Savage X Fenty y Parade, entre otras, a las que en algunos sectores se las conoce como las "anti-Victoria's Secret".

Simone Mariposa, influencer de Los Ángeles que se llama a sí misma "supergorda", dice que, si bien estas marcas van en la dirección correcta, le gustaría ver a mujeres más grandes representadas como "sexys", no solo con ropa interior básica. "Tiene que haber más diversidad real de tamaños, no solo en lo que se fabrica sino en lo que se anuncia. Sé que si veo un cuerpo que se parece al mío, sentiré que esa marca entiende de qué se trata", señaló.

Y, por si quedaba alguna duda, no parece que los desfiles espectáculo vayan a volver en un tiempo. El propio director ejecutivo de Victoria's Secret ha descartado la idea y ha explicado que no los ve “culturalmente relevantes en este momento”.