Al menos un bombero resulta herido en cada caso que atienden en Cochabamba.

El jefe de Operaciones y Búsqueda de la Dirección Departamental de Bomberos “Nataniel  Aguirre”, sargento primero Gilmar Cámara, informó que hay situaciones que exigen que el personal se someta al riesgo, por lo que es  común que se lesione. “Incluso hubo gente que falleció en labores de rescate”.

Hace dos años, por ejemplo, su colega murió cuando hacía la recuperación de cadáveres. Sin ir lejos, el pasado fin de semana, algunos uniformados del Grupo Bersa, que acudieron al río Caine de Anzaldo para rescatar un cuerpo, se lastimaron las extremidades inferiores y otros resultaron con heridas cortantes.

En 2017, Cámara también fue víctima de su trabajo. Ese año, mientras realizaba un salvataje en un barranco, luego de que un bus se embarrancó, sufrió una contusión a nivel del tendón.

Estimó que al menos un bombero se lesiona en cada incidente atendido.

Añadió que los daños más comunes que sufren son a nivel muscular o tendones. En casos casos excepcionales se fracturan.

Esa institución trabaja en cuatro “grandes especialidades”: combate de incendios, búsqueda y rescate, asistencia pre hospitalaria y servicio de explosivos.

Detrás del Grupo Bersa hay al menos 18 uniformados que trabajan 24 horas los siete días de la semana.