Opinión Bolivia

  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
  • Actualizado 08:49

Mató a su padre, lo enterró en un pozo ciego y alegó que 'estaba borracho'

El joven, llamado Javier, confesó el crimen y reveló el sitio en el que había escondido el cuerpo. Les pidió "perdón" a sus hermanos. Intentó justificarse diciendo que había bebido de más.
El joven fue presentado en la FELCC
El joven fue presentado en la FELCC
Mató a su padre, lo enterró en un pozo ciego y alegó que 'estaba borracho'

Un crimen macabro, que involucró a un joven y a su propio padre, sacudió a El Alto. El hijo, de nombre Javier, asesinó a su progenitor, de 58 años, y lanzó el cadáver dentro de un pozo ciego que había en su casa.

Todo sucedió al calor de los excesos y de un clima de rencor al interior de la familia, que vivía en la zona San Roque, en Villa Cooperativa. 

El 17 de mayo, Javier y su papá naturista compartieron bebidas alcohólicas, pese a no haber tenido una relación amena. Ya en horas de la madrugada del 18, se vieron envueltos en una riña.

De acuerdo con el relato del joven, ahora bajo el foco de la Justicia, el extinto solía decirle que no era su hijo. Ambos tenían problemas de convivencia, en concordancia con lo expuesto por el coronel Limbert Coca, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).

Javier confesó que acabó con la vida de su padre. Contó que la víctima cayó, se lastimó la cabeza y fue entonces cuando su hijo aprovechó para estrangular al señor con un alambre. 

Después, ya consumado el crimen, escondió el cadáver en un pozo ciego que existía en la vivienda. 

El entorno cercano de ambos se vio alertado por la desaparición del finalmente victimado. No fue sino hasta hace unos días cuando el joven decidió romper el silencio y confesar que había matado a su papá.

De hecho, reveló que los restos se hallaban dentro del pozo ciego. Cuando la Policía llegó hasta la escena del crimen, la madrugada de ayer jueves, descubrió a la víctima tapada con residuos y tierra, de acuerdo con Erbol.

Se conoce que el autor del asesinato intentó escapar cuando los agentes policiales estudiaban la escena, pero no lo logró. La Policía capturó al asesino confeso. 

Una vez aprehendido, este les pidió perdón a sus hermanos: “Que me perdonen, estaba borracho”.