Tres hombres han sembrado temor en Bolivia. Dos de ellos ya tenían condena por violación, pero no se encontraban en prisión. El otro es acusado de haber abusado sexualmente de una menor de 12 años valiéndose de la inyección de un líquido para dejarla inconsciente y llevar adelante su macabro plan.

ESTABA PRÓFUGO

Valeriano Balboa Mamani, un sujeto de El Alto que en 2014 fue sentenciado a 20 años de cárcel por abuso sexual, se encontraba prófugo de la Justicia, pese a haber recibido la condena. La Policía activó los mecanismos de búsqueda y dio con el agresor. 

Gestionó el mandamiento de aprehensión y el agresor cayó el 25 de mayo pasado. "Se iniciará una investigación que esclarezca los motivos por los cuales esta persona recibió sentencia el 2014 pero recién en 2021 se emitió su mandamiento de condena", apunta el Ministerio de Gobierno.

“La Policía Boliviana, realizando trabajos de seguimiento y vigilancia, ha logrado dar con el paradero de este sujeto y, el día de ayer, en la localidad de Batallas, se logra la aprehensión de este violador, que no habría cumplido con su condena en el territorio nacional”, acotó el ministro de esa cartera, Eduardo Del Castillo.

EN SU CASA

José Chipana Limachi, sentenciado a 20 años de prisión tras ser declarado culpable por haber violado de una menor de 16 años en 2008, gozaba de detención domiciliaria.

Este hombre también regresó a la prisión. La Policía lo presentó este jueves ante los medios de comunicación.

LA ADORMECIÓ

Ronald Q.M.es el hombre acusado de haber vejado sexualmente de una niña de 12 años, en San Juan, Los Yungas, el 20 de este mes.

De acuerdo con las investigaciones policiales, Ronald habría utilizado una jeringa, con un líquido desconocido en su interior, para llevar adelante el delito de violación.

“Este sujeto, una vez que ingresó al domicilio de la menor, cerró el dormitorio, y le inyectó una sustancia desconocida en la pierna con una jeringa, generando inconsciencia en la menor y evitando que pudiera solicitar ayuda a sus familiares”, detalló Del Castillo.

El hermano de la víctima, al notar que el cuarto estaba cerrado, entró por la ventana. La menor estaba con evidentes dolores en la zona baja. Tras la denuncia, aprehendieron al supuesto violador.