El exministro de Gobierno Carlos Romero dijo que funcionarios del Estado estarían creando "mentiras", refiriéndose al presunto "Plan Negro" contra el líder azul, Evo Morales, con el propósito de “proteger” al narcotráfico. Además, tildó al ministro de Justicia, Iván Lima, de “gonista” por sus declaraciones junto al ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo. Ambos habían mencionado “que no gobernaban para un solo partido político”.

“Con el señor Lima quisiera tener un debate político, porque lo que dijo yo me lo esperaría de un gonista, junto con el señor Del Castillo y la basura que lanza ese señor Llorenti desde el Ministerio de Gobierno con nombres falsos, como un cobarde. Están creando mentiras para proteger al narcotráfico”, dijo Romero, en No Mentirás.

La exautoridad también insistió en la existencia del denominado “Plan Negro” contra Evo y cuestionó de forma directa al ministro de Defensa, Edmundo Novillo,

“Sí existe Plan Negro, señor (Edmundo) Novillo, ¿no sabe? Compañero respetable, en determinado momento. Me sorprende Novillo. Hay una estrategia permanente de ataque hacia Evo Morales. Yo lo voy a demostrar con pruebas”, enfatizó.

Romero también se refirió a Del Castillo, y mencionó que, pese a que empezaba de buena manera “ahora es un instrumento”.

“Se aprovechan porque es una persona joven. Por eso el señor (Del Castillo) dice que va a coordinar con la DEA, pone el formato de propaganda de Usaid en El Alto, además dice algo más grave: que este Gobierno no gobierna para un partido político”, dijo.

También se refirió al diputado Rolando Cuéllar y cuestionó la veracidad de las supuestas cartas que este último tendría para vincular al dirigente Gerardo García, a Evo y a otros dirigentes con temas ilícitos.

“Yo he estudiado esas dos cartas, y hay una cosa que no les voy a perdonar. Me he reído tanto que me han provocado arrugas, luego les mostraré con datos la falsificación de sus cartas”, aseveró.

El celular de Evo, el denominado “Plan Negro”, las denuncias de corrupción en la ABC y los cruces verbales entre funcionarios actuales y exautoridades del Movimiento Al Socialismo continúan agravando la crisis política que vive el oficialismo en el país.