Un intento de robo de mineral y material de trabajo en el yacimiento boliviano Huanuni, administrado por el Estado, fue repelido por los obreros de esa mina y se saldó con la detención de 45 personas.

El suceso ocurrió entre el jueves en la noche y la mañana de este viernes en la mina Huanuni, en la localidad homónima situada en la región andina de Oruro, informó la estatal Corporación Minera de Bolivia (Comibol) en un boletín de prensa.

Los trabajadores de la estatal Empresa Minera Huanuni (EMH), que opera esa mina, denunciaron anoche que el cerro Posokoni, donde está el yacimiento, estaba siendo invadido por "jucus" o ladrones de mineral, ante lo cual se organizaron junto al personal de seguridad para frenar esta incursión.

En una de las bocaminas lograron detener a seis encargados de alertar a los "jucus" y en otra hallaron a "varias personas con sacos artesanales y comportamiento violento, desencadenando un enfrentamiento", dice el boletín.

Un comunicado conjunto de la Comibol y la EMH precisa que hasta el momento hay 45 detenidos y se activó el protocolo para coordinar otras acciones con distintas instancias gubernamentales.

"Al lugar acudió la Policía Nacional y el Ministerio Público para proseguir con las investigaciones", señala el comunicado.

También destaca "la valerosa actitud" de los mineros, personal de seguridad y técnicos de Huanuni "para evitar el robo de mineral a gran escala y de los materiales de trabajo de la misma".

La Comibol y la empresa Huanuni anunciaron que se reforzará la seguridad en el yacimiento y se seguirán "las acciones legales pertinentes" para que los ladrones de mineral sean sancionados.

El centro minero de Huanuni, que acoge uno de los principales yacimientos de estaño de Bolivia, se encuentra a 47 kilómetros de la ciudad de Oruro.

Los problemas de robo de mineral son constantes en esa mina, donde en 2019 hubo cuatro muertos en un enfrentamiento a tiros entre militares y "jucus".

El Ejército está a cargo desde 2008 de la seguridad externa en la mina Huanuni, mientras que la Policía se encarga de la vigilancia en la parte interior del yacimiento.

La EMH advirtió en 2018 de que el robo de mineral en sus minas conlleva pérdidas anuales de hasta 24 millones de dólares.