Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 20:43

Iglesia pide parar la deforestación salvaje y sanar las heridas graves de la naturaleza

Sergio Gualberti en su homilía en la Basílica San Lorenzo Mártir.
Sergio Gualberti en su homilía en la Basílica San Lorenzo Mártir.
Iglesia pide parar la deforestación salvaje y sanar las heridas graves de la naturaleza

La Iglesia Católica pidió este domingo parar la deforestación salvaje porque el país está seriamente afectado por el problema de la naturaleza, tal como testimonia la movilización de pueblos originarios y la marcha indígena que está próxima a llegar a la ciudad de Santa Cruz.

“No se puede esperar más, hay que intervenir para sanar las heridas graves de la naturaleza”, advirtió el arzobispo de Santa Cruz monseñor Sergio Gualberti, durante su homilía dominical pronunciada desde la Basílica Menor de San Lorenzo en la capital oriental.

Exhortó a cambiar nuestra mentalidad y adoptar una espiritualidad ecológica, parar la explotación irracional de los recursos naturales no renovables, los incendios de los bosques, incluso de parques nacionales y los avasallamientos.

Dijo que también es urgente asumir un estilo de vida austero con gestos concretos y cotidianos, evitando desperdiciar el agua, botar basura en la calle y tanto otros actos que dañan la naturaleza.

Gualberti recordó también la Jornada Mundial del Migrante y afirmó que pueblos enteros migran para salvar sus vidas no solo por los conflictos y las guerras, sino también porque se multiplican los desastres naturales provocados por el calentamiento global.

Sostuvo que estos desastres, cada vez de mayor envergadura, es el resultado de nuestro actuar irracional e irresponsable y que vuelven inhóspitos a tantos lugares donde por siglos han vivido poblaciones enteras.

“Por eso esta mañana estamos llamados a pedir perdón al Señor por los pecados en contra de los hermanos y también en contra de la creación, por eso pedimos que en su gran amor nos ayude a llevar adelante este compromiso común vital e impostergable”, manifestó.