El Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) lleva adelante pericias sobre el cadáver exhumado el pasado 25 de septiembre del cementerio Celestial y que presuntamente pertenece al exteniente Jorge Clavijo, asesino de la periodista Hanalí Huaycho, en febrero de 2013.

Sobre las acciones que lleva adelante el IDIF, el Fiscal General del Estado Juan Lanchipa señaló que a la fecha se tomaron placas radiográficas del cráneo, pero además uno de los brazos que presenta aparentes restos de epidermis, es sometido a un proceso de hidratación lo que podría revelar las huellas dactilares del cadáver.

“Está coreada la mano derecha, es decir tiene la semejanza de cuero, y se ha sometido de acuerdo al protocolo a un sistema de hidratación para que pueda desarrollar las crestas dactilares”, puntualizó Lanchipa.

Según el fiscal, el elemento elegido para ese procedimiento debe estar sumergido por algunos días en un líquido para que posteriormente se obtengan las huellas y someterlas al “proceso de huellografía”, dijo.

ODONTOLOGÌA FORENSE

El Fiscal agregó que, dentro de las pericias que se llevan adelante para establecer si el cadáver exhumado pertenece o no a Clavijo, se contará con la participación de un odontólogo forense, gracias a la colaboración del Colegio de Odontólogos, quien tomará moldes de la cavidad bucal para compararlas con el registro odontológico existente en la Academia de Policías.

El operador de justicia enfatizó que el IDIF no contó y no cuenta con un odontólogo forense por lo que se recurrió a esa organización para tener la participación de un profesional experimentado en esa área para coadyuvar en el esclarecimiento de la identidad del cadáver.

Puntualizó que una de las incongruencias del proceso fue que alguien firmó como odontólogo forense el año 2013 siendo que el IDIF no cuenta con un profesional en esa materia. “En los exámenes del 2013 aparece una persona que funge como odontólogo forense, estos y otros elementos han generado estas inconsistencias que han dado lugar a dudas”, sostuvo Lanchipa.

Al margen de esas pericias el IDIF también llevará adelante las pruebas de genética forense del cadáver, mismas que serán comparadas con las de un familiar de primera línea, en este caso el hijo de la pareja, los resultados se conocerán en el lapso de 25 días, según el Ministerio Público.