El recuerdo de los 53 años del asesinato del guerrillero argentino-cubano Ernesto Guevara de la Serna y los caídos bolivianos que combatieron en la Guerrilla de Ñancahuazú puso en evidencia el contraste polarizado que existe entre el discurso del actual Gobierno y el anterior, el de Evo Morales y el Movimiento Al Socialismo (MAS).

Para la presidenta Jeanine Áñez, Guevara era un “criminal invasor comunista”, mientras que para Morales era un “luchados incansable y revolucionario”.

Áñez, en el acto de ayer, aprovechó para saludar a las familias de los que perdieron la vida entre 1966 y 1967. “El mejor homenaje y desagravio a los bolivianos caídos para frenar al Che y a su invasión criminal y comunista es construir entre todos la libertad y la democracia”, expresó.

El ministro de Defensa, Luis Fernando López, fue en la misma línea. El jueves en la noche, la página oficial de su despacho compartió una imagen de Guevara muerto, con la leyenda: “Este es el destino de un aventurero que quiso mellar la dignidad de un pueblo”.

Durante el mandato de Morales, en contrapartida, el discurso era totalmente opuesto. En el aniversario 51 del fallecimiento del Che, en 2018, el exdignatario refirió en las redes sociales: “Como hoy, 1967, el mundo perdió a un luchador incansable, el hermano revolucionario Ernesto Che Guevara, pionero del ideal de liberación de los pueblos de América Latina y de la lucha contra el imperialismo. Nuestro homenaje al comandante Che Inmortal".

La dedicatoria figuró junto a un video con imágenes del argentino y una canción de fondo.

Morales no olvidaba el natalicio de Guevara. También lo solía recordar en su cuenta de Twitter cada 14 de junio. En 2019 publicó: “”Recordamos el nacimiento de Ernesto Che Guevara, hermano revolucionario y luchador incansable por la liberación de nuestros pueblos. Su ejemplo nos inspira para seguir trabajando por la libertad, dignidad y unidad de la #PatriaGrande ¡Che inmortal!”.