Por determinación del Ministerio de Defensa y el Mando Militar, las esposas de los militares ya no se beneficiarán con el subsidio de lactancia en dinero, sino que a partir de ahora recibirán productos, como el resto de las mujeres.

La decisión se dio ante la ola de críticas por el trato diferente que reciben las madres, quienes denunciaron presunto sobreprecio en diferentes productos que da el Servicio de Desarrollo de las Empresas Públicas Productivas (SEDEM).

“El Ministro de Defensa y el Mando Militar, reunidos luego de varias consideraciones sobre el beneficio prenatal y lactancia, han dispuesto que este beneficio sea entregado en especie a los beneficiarios de la institución castrense a partir de julio en los lugares y en tiempo oportuno en coordinación con el SEDEM”, se lee en el documento.

La diferencia en el trato que reciben las esposas de los uniformados con relación al resto fue, incluso, cuestionada por el Gobierno.

El viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, aseguró previamente que “si estuviera en sus manos, inmediatamente” cambiaba dicha figura.

Por su lado, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, había afirmado que este tema debe ser “analizado y trabajado” para que exista “igualdad de condiciones”.