Las subalcaldesas del sector Mallasa, Sheyla Dávalos, y de la zona central Max Paredes, Jacqueline Chavarría, fueron alejadas de sus cargos por denuncias de corrupción e irregularidades que se conocieron hace dos meses. 

Ellas salieron al frente ayer para acusar al subalcalde Reynaldo Honorio de acoso sexual a jóvenes que buscaban trabajo en el municipio, reportó Oxígeno.

En la Alcaldía de La Paz aseguraron que las acusaciones son infundadas y expresaron su rechazo “ante la actitud irresponsable, infantil y poco profesional de ambas exfuncionarias” y anunció que las investigaciones contra ellas seguirán su curso por parte de la Dirección de Transparencia.

“Vamos a continuar centrados en las denuncias de incumplimientos de deberes, accionar con loteadores y otras irregularidades”, dice el comunicado emitido por el municipio paceño en el que además señala que el alcalde Iván Arias ordenó la destitución.

Dávalos indicó además que habría corrupción y acoso político como laboral, por lo que decidió separarse del partido Somos Pueblo.

Chavarría añadió que los casos de corrupción fueron puestos en conocimiento del alcalde Iván Arias, pero no se siguió un proceso. Dijo también que hay 15 jóvenes que se presentaron para conseguir una fuente laboral, pero fueron acosadas sexualmente.

Arias explicó en Panamericana que la medida fue meditada y que responde a una serie de denuncias que se colectaron en los últimos dos meses. También lamentó que se utilice la ofensa y no se pueda asumir una culpa.