El Procurador General del Estado, Wilfredo Chávez, informó ayer que se está insistiendo ante la Fiscalía para que se convoque a declarar a los representantes de la Iglesia católica que estuvieron en las reuniones de noviembre de 2019, en el marco del caso denominado “Golpe de Estado I”.

Chávez argumentó que deben declarar todos lo que estuvieron en las reuniones realizadas en la Universidad Católica, donde se trató el tema de la sucesión presidencial. En las mismas estuvieron obispos, diplomáticos, además de políticos del MAS y oposición.

El Procurador informó que se ha presentado la petición ante la Fiscalía para que declaren todos los involucrados, pero no hubo respuesta hasta la semana pasada.

Explicó que, mediante la solicitud, se ha argumentado que Bolivia es un Estado laico y que los religiosos implicados no tienen una protección consular, en el marco de la Convención de Viena, porque la misma es solamente para el Nuncio Apostólico del Papa.                     

Chávez se dirigió a la Fiscalía y dijo: “no quisiéramos pensar que se ha de encubrir con esta inacción a esta gente que tiene que declarar”.

Señaló que esperará hasta hoy la respuesta del fiscal Omar Mejillones, encargado del caso, o de lo contrario acudirá ante el juez de la causa para insistir con el pedido.