Bolivia lideró la campaña para la liberación de las patentes de vacunas contra el coronavirus COVID-19 a través de la modificación de los estándares internacionales en la Cumbre Iberoamericana que se celebró ayer, donde España anunció su apoyo a la medida y acciones inmediatas.

En la oportunidad, el presidente Luis Arce también hizo conocer el reclamo hacia los países desarrollados, en el que coinciden varios países e incluso el papa Francisco, en busca de un acceso equitativo a las dosis. 

El Primer Mandatario fue uno de los que más insistió y exhortó a la Organización Mundial del Comercio (OMC) y a la Organización Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI) en la liberación de las patentes no solo de las vacunas sino también de los medicamentos.

“La ciencia médica debe estar al servicio del ser humano sin ningún tipo de discriminación geográfica, política o social, y el acceso a la vacuna debe ser visto como un derecho humano”, remarcó.

La Cumbre, pese a no aprobar ninguna declaración al respecto, sí manifestó su "disponibilidad a tomar como referencia" la Declaración de Doha de 2001 sobre los derechos de propiedad intelectual relacionados con el comercio y la salud pública, que afirma que dichos derechos no deben impedir que los países adopten medidas para proteger la salud.

APOYO

España avanzó, por su lado, y, según EFE, se ofreció a liderar ante la OMC, la discusión sobre una posible flexibilización de las patentes para "analizar opciones que permitan avanzar en una lucha efectiva contra la COVID-19".

Asimismo, el presidente Pedro Sánchez anunció la donación de entre el 5 y el 10 % de las dosis que reciba el país este año, lo que supondrá alrededor de 7.5 millones de viales al final de 2021, a través de la Organización Mundial de la Salud (OMS), COVAX y el apoyo de la Organización Panamericana de Salud (OPS), “según las necesidades” de cada país.

La XXVII Cumbre Iberoamericana celebrada ayer de manera semipresencial en el Estado europeo del Principado de Andorra se convirtió en la “cumbre de las vacunas”, cuando los diferentes países acordaron acudir a la comunidad internacional con "una sola voz" para defender un acceso equitativo y universal.

LA ECONOMÍA

Arce saludó la aprobación del comunicado especial en la Cumbre sobre el alivio a la deuda externa y la crisis económica, propuesto por Bolivia, que refleja la necesidad de generar un espacio de diálogo con los organismos internacionales para enfrentar las consecuencias financieras derivadas de la pandemia, reportó ABI.

Manifestó que la lucha para combatir la crisis en países en desarrollo debe afrontarse de forma integral por todas las naciones en el ámbito multilateral, frente a la problemática planteada, con la necesidad de conversar para que los organismos internacionales financiadores asuman responsabilidades.

Asimismo, advirtió que las naciones del Norte no superarán los efectos económicos de la pandemia por más que destinen miles de millones de dólares para sí mismas, si las naciones del Sur son dejadas en la vulnerabilidad.