En medio del paro cívico que se cumple con regular contundencia en el país, el presidente del Estado, Luis Arce, afirmó hoy que Bolivia no volverá a vivir una crisis política como la de 2019, año en que las protestas ciudadanas y políticas impulsadas por la oposición culminó en la renuncia del exmandatario Evo Morales (2006-2019).

"Con el patriotismo de hermanos y hermanas como ustedes, que son la inmensa mayoría de la patria, no volveremos a los periodos nefastos de nuestra historia, como fue el golpe de Estado de 2019 o como el que pretenden abrir nuevamente unas minorías", dijo Arce en un discurso en el departamento de Pando.

El gobernante hizo su advertencia mientras transcurrían las primeras horas del paro cívico, que se sintió con fuerza en Santa Cruz y con mucha menos intensidad en La Paz, Cochabamba y otros departamentos.

Arce aseguró que en Bolivia está todavía fresco el recuerdo del "golpe" que terminó con el gobierno transitorio de Jeanine Áñez actualmente detenida y bajo proceso judicial€”.

"Después de 12 meses oscuros y violentos impulsados por los golpistas, hemos retomado el irrenunciable camino de la liberación nacional que no es otro horizonte que el vivir bien", afirmó el Presidente,

Sin dar señales de atender las dos principales demandas de la protesta, Arce dijo que ésta respondía a intereses de minorías enfrentadas a la gran mayoría nacional, de indígenas y campesinos, que consideró representada en el Gobierno por el "proceso de cambio" iniciado por el MAS en 2006.