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  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 20:52

Mujeres indígenas de Latinoamérica se unen para proteger sus derechos

Indigenas. EFE
Indigenas. EFE
Mujeres indígenas de Latinoamérica se unen para proteger sus derechos

Más de 20 mujeres indígenas llegadas de 8 países de Latinoamérica se congregaron esta semana en Lima para analizar y someter a autoconsulta el borrador de un documento inédito que busca cubrir el vacío en el marco legal internacional sobre una norma específica que proteja sus derechos.

"Este sería un primer instrumento para mujeres indígenas que no tenemos. Sería para nosotras un logro", declaró a Efe Melania Canales Poma, responsable de la Coordinación Regional Sur del Enlace Continental de Mujeres Indígenas de las Américas (Ecmia Sur).

Canales, quien también es presidenta de la Organización Nacional de Mujeres Indígenas Andinas y Amazónicas del Perú (Onamiap), es una de las más de 20 lideresas que han analizado con lupa el borrador de la denominada "Recomendación General N°39" del Comité de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW), de Naciones Unidas.

A fin de garantizar un proceso integral en la elaboración de este documento, que arrancó en julio pasado y podría ser aprobado en octubre, Ecmia Sur convocó entre el martes pasado y este jueves en Lima una autoconsulta con representantes de pueblos originarios de Colombia, Venezuela, Brasil, Bolivia, Paraguay, Argentina, Uruguay y Perú. El objetivo de este encuentro, que tiene lugar en un hotel del distrito limeño de Miraflores, fue "dar aportes" y revisar aquellas todo lo que "quedaba todavía por afinar", cuenta Canales.

DISCRIMINACIÓN 360 GRADOS El borrador de la CEDAW aborda asuntos relacionados con los derechos de las mujeres y niñas indígenas a la salud y a la educación interculturales, a la seguridad y soberanía alimentarias y a la protección de los territorios colectivos, entre otros. Pero, según detalla la coordinadora de Ecmia Sur, las lideresas prestaron especial atención al derecho a una "vida diga" libre de discriminación.

"(Cuando) se habla de las violencias, muchas veces está centrado (sic) solo en la violencia de género y las mujeres indígenas no solamente vivimos la discriminación de género, ¿dónde va el racismo que por años (...) nos han hecho sentir inferiores? Pero también hablamos de la violencia clasista", comenta Canales, quechua y oriunda de la región andina de Ayacucho.

Por eso, agrega, "es importante discutir las múltiples violencias". "No solamente el hombre nos violenta, sino también estructuralmente esta sociedad nos violenta a través del racismo, el clasismo, el colonialismo, incluyendo el extractivismo", sentencia la mujer, ataviada con el típico sombrero ayacuchano.

¿Y LA VOLUNTAD POLÍTICA? Durante tres días, las lideresas han estado analizando párrafo por párrafo el borrador de la Recomendación de la CEDAW, que, de concretarse, no solo visualizará la discriminación interseccional hacia niñas y mujeres indígenas sino también obligará a los Estados a comprometerse con el fortalecimiento de sus políticas para garantizar sus derechos.

Este último punto, sin embargo, las organizaciones que integran Ecmia Sur lo ven con bastante escepticismo porque, en palabras de Canales, "siempre los Estados le sacan la vuelta" a esta suerte de recomendaciones. "Si no hay voluntad política, lo que estamos haciendo ¿de qué nos va a valer? (...) ¡Que nos escuchen!", reclama en declaraciones a Efe Gladys Hernández, vocera de la Organización Nacional Indígena de Colombia (Onic).

La mujer sikuani, quien llegó a Lima en representación de 115 pueblos originarios de su país, coincidió con Canales al afirmar que las problemáticas que azotan a las mujeres indígenas son compartidas en toda la región y que, solo unidas, podrán encauzar sus demandas en "una sola voz". Carla Samon Ros