El Comando Departamental de la Policía participó hoy en una misa en la plaza '14 de Septiembre' para pedir a Dios y la Virgen de Copacabana el retorno de la tranquilidad y la paz en la región, en respuesta a un conflicto político-social  vigente hace casi un mes.

    "Nos hemos congregado en una eucaristía para pedirle al Supremo Creador, a través de nuestra patrona y generala de la Policía Boliviana, la Virgencita de Copacabana, pueda darnos esta tranquilidad, esta paz que necesitamos", dijo el comandante Departamental de la Policía, Jaime Zurita.

    La autoridad solicitó a la población que entienda que no pueden seguir con enfrentamientos en las calles y las carreteras departamentales.

    Invocó, asimismo, a los sectores sociales aún movilizados que depongan sus acciones violentas y "se encuentre la paz, porque no vale la pena enfrentarnos".

   "Las situaciones están cambiando y lo que tenemos que hacer es encontrarnos entre nosotros. No vale la pena que haya acá gente que vaya alterando el orden público, porque lo que tiene que hacer la Policía es restablecerlo", aseguró.

    El jefe policial manifestó, por último, que la población debe recordar que debajo de cada uniforme de un policía está "una persona que siente, que tiene problemas, que se enamora, que ríe, que llora, que tiene sentimientos, rabia y frustraciones".