En medio de estrictas reglas de seguridad sanitaria contra el coronavirus, la tenista checa Petra Kvitova, dos veces ganadora de Wimbledon (2011 y 2014), volvió este martes a la competición en un torneo benéfico jugado en Praga después de tres meses de parón obligatorio por la pandemia.

Ocho hombres, en tierra batida, y ocho mujeres, en pista dura, disputan desde este martes en el Club Sparta de Praga los cuartos de final de la llamada Copa del Presidente de la Federación Checa de Tenis, que se reanudará el jueves con las semifinales y final.

La principal raqueta checa, Karolina Pliskova, tercera del mundo, se había excusado del certamen por una lesión de espalda.

Kvitova, actualmente número 12 del mundo, ganó este martes su primer encuentro tras los meses de suspensión contra Barbora Krejcikova, número 115 del ránking WTA, por 7-6 y 6-2.

Las autoridades de la República Checa permiten desde el lunes actos público con hasta 300 personas.

En el partido de Kvitova-Krejcikova había unas pocas decenas de personas, en su mayoría familiares y periodistas, que debían respetar las reglas de distanciamiento físico y llevar mascarilla.

Como medida de precaución sanitaria, los jueces de línea debían llevar mascarillas, los recogepelotas mascarilla y además guantes, mientras que solo las jugadoras y el árbitro central estaban en la cancha sin mascarilla.