Luego de cinco años (2017-2022) defendiendo la camiseta de Wilstermann con la que logró dos títulos nacionales (2018 y 2019), Serginho comenzó ayer una nueva etapa en la vereda del frente: Aurora.

Además, hay que recordar que el brasileño se fue de Cochabamba hace casi dos meses, entre lágrimas para cerrar su etapa en el Hércules.

El 19 de enero de este año quedó marcado como la fecha del adiós de quien fuera clave para las campañas históricas del Aviador en las ediciones 2017 y 2020 de la Copa Libertadores de América.

Pasaron ayer 46 días de ese emotivo discurso y Sergi (apodo con que el titular celeste, Jaime Cornejo lo “rebautizó”) tuvo su primera práctica con la escuadra de Roberto Pérez y su presentación oficial.

El jugador ya estaba en la Llajta desde el viernes y siguió el sábado desde el palco del estadio Félix Capriles las incidencias del triunfo (2-0) del Equipo del Pueblo sobre Independiente de Sucre.

ESFUERZO

“Siempre hablábamos de poder jugar juntos, nos toca disfrutar este momento. Ser parte de un lindo grupo. Lo veo muy bien al equipo, tiene seguridad y sabe lo que quiere. Nosotros fuimos rivales (cuando era parte de Wilstermann), pero hoy me toca estar acá y eso es fútbol, me toca dar mi mejor versión”, aseguró Serginho en su primera conferencia de prensa como jugador de Aurora.

Cornejo acotó que si el plantel clasifica a un torneo internacional, el brasileño extenderá su vínculo contractual, que es por un año en principio.

Asimismo, el aún titular celeste acotó que prevén culminar “los trámites corrrespondientes” para que el jugador esté habilitado con miras al duelo del domingo (17:30) contra Bolívar en La Paz, por la sexta fecha del Campeonato de la División Profesional.

EL FICHAJE

“Yo me fui a un equipo de Brasil porque ya no tenía contrato en Wilstermann, tenía una oportunidad de jugar en Brasil por poco tiempo”, comenzó para explicar de qué manera tuvieron lugar las tratativas.

Serginho manifestó que no tenía previsto quedarse mucho tiempo en el Brasilia de la tercera división de su país de origen. 

“Lo que pasa es que en el equipo de Brasil solo iba a jugar dos, tres semanas, después tenían que contratar a otro jugador. Me apareció la situación de Aurora y otro club de Bolivia. Por más de que éramos rivales, yo ya tenía contacto con Cornejo, algunos jugadores y después de un tiempo me hicieron la invitación, además que ya estaba descartado del Rojo”.

Respecto a la dorsal que llevará, el brasileño indicó que aceptará “la que le asignen” porque Jair Torrico ya tiene la 10 que él vestía en el Imperio Escarlata.

“Mis hijos me dijeron que el 77 podría funcionar”, dijo el futbolista a lo que Cornejo añadió: “Sí o sí, la casaca tendrá un 7”.

Respecto a los comicios suspendidos, el directivo señaló que aún esperan la respuesta para su apelación al dictamen de la Comisión Electoral de la FBF.