El historiador potosino Luis Oporto fue asignado el pasado jueves como presidente del Consejo de Administración de la Fundación Cultural del Banco Central de Bolivia (FCBCB). En la entrevista otorgada este medio, a pocos días de haber asumido el cargo, el exdirector de la Biblioteca y Archivo Histórico de la Asamblea Legislativa Plurinacional, indicó que se estudian iniciativas para poder emplazar un primer repositorio o centro cultural en Cochabamba, el único departamento del eje troncal en no contar con uno.

Sería el Club Social de la plaza 14 de Septiembre el edifico escogido para ser la primera entidad de la Fundación en la Llajta; Oporto no realizó mayores adelantos; del mismo modo, el actual Consejo analiza un cambio de estatutos del anterior gestión.

P: Después de un año tan crítico por el sector, que se vio afectado con el cierre del Ministerio de Culturas, y sus fondos de apoyo, y la pandemia que paralizó el movimiento cultural, ¿cuáles serán las acciones más inmediatas, a corto y mediano plazo, que tomará la FCBCB para refortalecer el área artística/cultural?

R: Sin duda alguna el 2020 será recordado por la insensibilidad del gobierno transitorio hacia la cultura y la educación. El daño provocado al sector cultural no termina de ser evaluado a nivel nacional, pues el cierre del Ministerio de Culturas y Turismo, junto al de Deportes y Comunicaciones, puso en pausa a los creadores de culturas y artes en el territorio nacional. Felizmente, esa larga noche ha concluido con la determinación del Gobierno del presidente Luis Arce, de reponer el Ministerio de Culturas.

En ese contexto, la FCBCB, impulsará políticas de apertura a la sociedad en su conjunto, a través de sus Repositorios Nacionales y Centros Culturales. En el primer caso, los museos y archivos que custodian el invaluable patrimonio cultural y documental del Estado Plurinacional, desde la época prehispánica, debe ser accesible de la manera más irrestricta posible, en directo beneficio de los sectores mayoritarios de nuestra sociedad, privilegiando al sector escolarizado, conformado por estudiantes de escuelas y colegios, propiciando acciones institucionales para aproximarnos a esos jóvenes con el propósito de que conozcan ese patrimonio, donde reposan las bases mismas de la identidad nacional. Nada mejor que jóvenes orgullosos de su origen, que nos remonta a una de las culturas más grandes de la civilización mundial pues lo que se generó en Los Andes, en muchos aspectos no tiene comparación. Los bolivianos de hoy, somos herederos de esa alta cultura, pero, al parecer, ese hecho no se aprecia por parte de las nuevas generaciones. Por otra parte, los centros culturales de la FCBCB, deben fortalecer sus nexos con los creadores y hacedores de artes y culturas en nuestro país, de tal manera que usen esos espacios culturales para mostrar su creatividad y experticia.

La FCBCB impulsará la virtualidad para garantizar esos objetivos, dada la coyuntura de salud que enfrentamos y que se mantendrá aún por un tiempo difícil de pronosticar. La virtualidad, sin embargo, es una respuesta estructural para poner al alcance de la sociedad, el patrimonio al que hacemos referencia.

P: La anterior gestión quiso desarrollar toda una reestructuración en la Fundación; el anterior presidente del Consejo, Guillermo Mariaca, indicó que se iba a cambiar el estatuto porque era centralista, reuniendo “todas las decisiones en una autoridad operativa y en una autoridad ejecutiva” ¿Cuál es su opinión frente a esta declaración y si se cambiará el estatuto que la Fundación tiene desde 2018?

R: Existe, en mi criterio, una confusión sobre este tema. La FCBCB tiene sus roles establecidos por sus estatutos y se guía,  en diseñar sus planes de acción considerando las políticas culturales emanadas desde el Estado, que dicho sea de paso concretan los preceptos establecidos en la Constitución Política del Estado, y este documento fundacional de las bolivianas y bolivianos, precisamente incorporó en Bolivia el régimen de autonomías que en el caso de las culturas y el patrimonio documental, propugna las competencias exclusivas en los niveles central y subnacional de gobierno.

No puede ser de otra manera, pues el patrimonio cultural y documental tiene como titular al pueblo boliviano. Por tanto, sus políticas y planes de acción, deben beneficiar a los titulares: todos los miembros que componen la sociedad boliviana. En ese sentido, la base técnica de la FCBCB, que es un ente administrador esencialmente, está conformado por nueve entidades: cinco repositorios nacionales y cuatro centros culturales, y estos entes, en general, gozan de autonomía técnica, programan sus operaciones anuales, diseñan sus planes de acción y ejecutan esas políticas culturales, en beneficio de los titulares del patrimonio cultural y documental. Desde su origen se observa una vocación descentralizadora en la FCBCB, dado el carácter regional de sus principales repositorios nacionales y centros culturales.

Sin embargo, es necesario puntualizar que las instituciones no son estáticas en el tiempo y evolucionan y se desarrollan en armonía con el desarrollo nacional, para cuyo fin se ven en la necesidad de responder a los desafíos y retos emergentes del desarrollo nacional. Los estatutos deben adecuarse a esos cambios, que muchas veces son necesarios, por ello mismo se establece esa posibilidad. El actual Consejo de Administración está analizando la propuesta del anterior Consejo que respondía en todo a la línea impuesta desde el régimen más nefasto de la historia nacional.

Finalmente, considero que es necesario evaluar lo que ha sucedido al interior de la FCBCB luego de la ruptura constitucional provocada por los hechos políticos de octubre y noviembre. Puedo señalar que de los cinco proyectos de inversión pública aprobados para la gestión 2020, solo uno se ha ejecutado de manera efectiva, el que corresponde a la Casa de la Libertad, sobre todo considerando que el financiamiento para su ejecución fue garantizado por el Banco Central de Bolivia.

  

P: Cochabamba es el único departamento del eje central si un repositorio o centro cultural de la Fundación. ¿Existen planes de abrir un centro cultural en la ciudad?

R: Hemos observado en los informes de los anteriores Consejos de Administración interesantes e importantes iniciativas. Entre ellas se menciona, precisamente, uno que se refiere a una de las casas patrimoniales que se encuentra en el centro de la ciudad, a pocos pasos de la Plaza de Armas. Me refiero al Club Social, conformado en su época por miembros connotados de sus élites, muy emblemático para comprender parte de la historia de la ciudad del valle. Han dejado como legado cultural arquitectónico una de las casas patrimoniales más representativas en su género. Lo que puedo señalar es que se hará un estudio de esa y otras iniciativas.