Artista cuelga y escribe con sangre bandera LGBTI para protestar por sus derechos

La artista conceptual Serena Vargas, acompañada de representantes de colectivos y organizaciones, realizó esta mañana una performance al exhibir en varios lugares públicos dos banderas con los colores de la comunidad LGBTIQ+, que ella misma manchó con sangre para escribir la palabra "impunidad", como forma de protesta en contra de los "casos de feminicidio en mujeres trans que quedan impunes", además de la "violencia y discriminación" en contra de esa comunidad.
Serena realizó toda la representación con una polera blanca que anunciaba "mamá bisexual". Comenzó en las puertas del Palacio de Justicia, después se instalaron en la fachada de la Catedral de San Sebastián, en la Plaza 14 de Septiembre, para terminar en las puertas de la Unidad Táctica de Operaciones Policiales (UTOP) de la avenida Heroínas, donde fueron desalojadas por algunos efectivos al estar "interrumpiendo el tráfico de vehículos de la Policía".
"De acuerdo a lo que investigué, son apenas 80 casos registrados (de violencia de género) que están en proceso, los demás se quedan ahí. Es muy difícil para la comunidad (LGBTIQ+) hacer la denuncia porque te enfrentas a un sistema con muchos prejuicios, homofóbico. Hacer una denuncia es perder el tiempo y enfrentare a que también te violenten", aseguró la artista visual Serena Vargas, quien lleva varios años difundiendo su arte, siendo la exposición individual más reciente "No estoy loca, soy un ciborg" en el Museo Nacional de Arte (MNA) de La Paz.

Ejemplificó su causa con el caso de Alessandra, la joven trans de 19 años que fue encontrada muerta el año pasado en un hostal céntrico de la ciudad. "Cuando se trata de feminicidios de mujeres trans, la situación es muy penosa. La familia no se hace cargo de la muerta, los procesos se estancan, son los mismos activistas quienes deben iniciar la querella y muchas veces no se los tipifica como feminicidio porque son mujeres trans, incluso en los medios se los trata como 'el", aseguró.
La intervención se realizó en el marco del Festival Cultural Cuir, que se realiza de manera presencial y virtual hasta el 30 de junio en cinco ciudades.