El ambiente de la música nacional ha perdido, una vez más en época de pandemia, a otro exponente notable que supo trascender su estilo, el nombre de Bolivia y la calidad del charango fuera de las fronteras del país. Ha muerto en las últimas horas el aiquileño Orlando Pozo Tapia, conocido como "El aiquileño".

Era cantautor, tenía un recorrido amplio de 40 años como artista y en 2014 fue galardonado por la Cámara Alta del Senado por su trayectoria.

Conocido como “la voz ancestral”, Orlando cautivó con su voz y su talento. “Cholita de ojos azules” es uno de los éxitos que recordarán aquellos que siguieron muy de cerca su carrera.

En redes sociales, todo es dolor por su partida. "Siempre te recordará con mucho cariño. Descanza en paz, tío", escribió Nely, en Facebook.

"Descansa en paz y cántale en el cielo a papá Dios, querido amigo Orlando Pozo Tapia. Gracias por tu amistad, respeto y cariño con los que me honraste (...)", posteó Juana Maturano.