La nueva estructura tarifaria, basada en el consumo, que diseñó el Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa) comienza a regir “por ciclos”. Es decir, los consumidores serán implementados en el plan de manera paulatina. Esto es posible luego de retrasos debido a las vicisitudes de la pandemia, que ha puesto freno al plan. Es la misma estructura de tarifas que la empresa local ha elaborado desde 2016, que ha conseguido validar en 2019 y que debía entrar en vigencia en el primer semestre de 2020, pero que empezará a reflejarse gradualmente, desde la siguiente boleta.

De acuerdo con lo establecido, se ha dispuesto que la nueva estructura entre en vigencia de forma paulatina y con los usuarios divididos en 20 ciclos, de modo que el impacto técnico y también el social no sean fuertes. La escala no se aplicará directamente y al mismo tiempo en toda Cochabamba. “No queremos generar aún un impacto muy significativo. La implementación debe ser de manera gradual”, le explicó a OPINIÓN el analista comercial de la empresa, Carlos Coca.

Semapa se inclinó por la opción de utilizar el sistema de los ciclos y se desmarcó del que había considerado antes. Previamente contemplaba cuatro macrozonas para la distribución. Esto consistía en apuntar a los sectores que recibían agua 24/7, es decir, las 24 horas del día. No obstante, la empresa determinó prescindir de esa alternativa, teniendo en cuenta problemas con la facturación.

De manera mensual, desde febrero, se efectuarán dos ciclos hasta completar los 20 en 10 meses. Los ciclos representan grupos de lecturas y de rutas para el cobro de usuarios. En el aviso de cobranza figuran la categoría y un ciclo. Este último definirá si el cliente será parte o no de determinado segmento.

Se ha resuelto que los consumidores del ciclo 1 y del 2 se incluyan en enero. Se prevé que el proceso inicie en la zona norte. “Para el segundo período, que sería febrero con el consumo de marzo, debería ser el 3 y 4. Así va a ir aumentando, según vayamos avanzando”, señaló el analista comercial. “El 1 se termina de leer y después de unos días se factura. Empezamos con el  2 y luego se factura”, detalla. La factura de enero hará referencia al consumo de diciembre.

SUMARSE En caso de que los sectores que integren ciclos como por ejemplo el 15 o 16 quieran sumarse a la nueva estructura de forma anticipada, Semapa socializará un prototipo de carta que los interesados deberán descargar y completar con datos como el nombre, la cédula de identidad y el código de referencia para el servicio.

EN QUÉ CONSISTE Esta nueva estructura dejó caducas las categorías R1 (lote baldío, casa abandonada o en demolición), R2 (0 a 6 viviendas con una o dos habitaciones), R3 (7 a 9 casas económicas  de 1 o 2 plantas) y R4 (mayor a 10 viviendas de dos o más plantas que dispongan de todas las dependencias) para concentrarse en el cobro según la cantidad de consumo.

Para el gerente comercial de la empresa, Henry Bobarín, el plan tiende a generar conciencia en cuanto al uso del elemento líquido. Así, aquel que consuma más, deberá también abonar más.

Ahora, todas las categorías R se fundieron en la Doméstica, a su vez dividida en la subcategoría Doméstica Solidaria (usuarios cuyo predio se use para vivienda y el agua para consumo humano, que además reporten un consumo menor o igual a 10 metros cúbicos por mes) y la Doméstica (el predio se dispone para vivienda y el agua para consumo humano, donde se registre un consumo mayor o igual a los 11 metros cúbicos por mes), a secas.

Además de estas, también se encuentra la Comercial, que va dirigida a los consumidores cuyo predio sea usado para un negocio y el agua para consumo humano. También figuran la Industrial (predio usado para un negocio y el agua como insumo), Estatal (colegios fiscales, hospitales, parques y entidades públicas), Seguridad Ciudadana (módulos de la Policía, con un consumo de 60 litros por habitante por día) y Seguridad Social (predios dispuestos para organizaciones de huérfanos, asilos, víctimas de violencia y personas con discapacidad).

CÁLCULO DEL PAGO Para los usuarios del sistema medido, la Doméstica Solidaria tiene un cargo fijo de 5 bolivianos por mes, con una tarifa mínima de 1.50 por cada metro cúbico. Si el cliente consume 15 metros cúbicos, pagará 27.5 bolivianos. En el caso de la Doméstica, el cargo fijo es de 10 bolivianos y el cargo por metro cúbico varía según la cantidad. Si la persona utiliza de 1 a 10 metros cúbicos, cancelará 2 bolivianos por cada uno de ellos. A partir de los 11 metros cúbicos hasta los 20, pagará 5 bolivianos por metro cúbico. Si el usuario utiliza 15 metros cúbicos, deberá multiplicar 15 por 5 (precio de cada metro cúbico) y sumarle los 10 bolivianos del cargo fijo, lo que hace un total de 85 bolivianos. Ese mismo procedimiento matemático se debe efectuar con las demás categorías, según consumo y precio variable por metro cúbico.

En el caso de las tarifas del sistema no medido, la tabla se divide en cuatro partes: Doméstico, Comercial, Industrial y Estatal. En la primera, si el consumo promedio es de 14 metros cúbicos, la tarifa AP es 50 bolivianos, con una tarifa fija de 100. En la Comercial, si el usuario consume un promedio de 44 metros cúbicos, abonará 635 bolivianos. La tarifa fija es de 1.270.

En las próximas horas, la empresa socializará el cronograma de los 20 ciclos, que OPINIÓN ya le brinda en esta edición.