Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 00:24

Sala situacional de COVID-19 plantea tres opciones de cuarentena ante estallido de casos

"Se ha llegado a un punto en el que las autoridades de Cochabamba deben tomar una decisión firme para proteger la vida, basada en informes técnicos”, afirmó Yercin Mamani, jefe de Epidemiología del SEDES.

El jefe de Vigilancia Epidemiológica del Servicio Departamental de Salud (SEDES) de Cochabamba, Yercin Mamani. OPINIÓN
El jefe de Vigilancia Epidemiológica del Servicio Departamental de Salud (SEDES) de Cochabamba, Yercin Mamani. OPINIÓN
Sala situacional de COVID-19 plantea tres opciones de cuarentena ante estallido de casos

La crítica situación sanitaria de Cochabamba será tratada esta tarde en el Comité de Emergencia Departamental (COED) y la Sala situacional propondrá medidas más drásticas para intentar frenar los casos de COVID-19.

"Se ha llegado a un punto en el que las autoridades de Cochabamba deben tomar una decisión firme para proteger la vida, basada en informes técnicos”, afirma Yercin Mamani, jefe de Epidemiología del SEDES.

Las tres propuestas de la Sala Situacional son:

1.    Cuarentena rígida de siete días.

2.    Cuarentena rígida de viernes a domingo, y restricciones de circulación (lunes y miércoles, las personas cuyo número de carnet de identidad termine en número impar; martes y jueves, los pares)

3.    Cuarenta rígida de sábado y domingo

    

Todas las propuestas incluyen actividades de rastrillaje intensivo en todo el eje metropolitano. Además de medidas conjuntas de monitoreo y vigilancia de cumplimiento de las normas de bioseguridad.

Las medidas son urgentes ya que se prevé que en los próximos siete días, en Cochabamba, unas 850 personas cada 24 horas comenzarán su lucha personal para combatir el virus SARS-Cov-2. Entre 17 y 20 personas (2%) necesitarán terapia intensiva, y unos 150 (18%) requerirán apoyo adicional de oxígeno para poder respirar y medicamentos especiales para tratar de subsanar el daño en sus pulmones.

Actualmente no hay camas suficientes de terapia intensiva y, las que hay, están ocupadas por otros enfermos que se debaten entre la vida y la muerte. Tampoco se encuentra en el mercado farmacéutico, los medicamentos necesarios, y si se los consigue, valen miles de bolivianos.

La oferta de oxígeno medicinal es insuficiente y no se puede hacer nada, porque instalar una planta de generación de este gas lleva tiempo que no se dispone.