El alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, informó ayer que envió una carta al Ministro de Salud pidiéndole al menos 138 ítems para salud, de profesionales cuyos contratos vencieron en diciembre de 2021.

Haciendo referencia a los resultados de ejecución de su gestión en 2021 y los planes para 2022, la autoridad resaltó que en el área de salud, más allá de los recursos previstos, se dispondrán los necesarios para hacer frente a la pandemia del coronavirus, COVID-19.

Además, entre sus acciones iniciales de este año está la exigencia de más profesionales médicos.

“Hoy mismo (por este martes) acabo de mandar una carta al Ministro de Salud para pedirle que urgentemente, desesperadamente, nos asignen los ítems que nos tengan que dar para atender las unidades de terapia intensiva”.

La autoridad detalló que, en los hospitales de la ciudad hay camas sin ocupar por falta de ítems.

“En este momento voy a llamar también, en este instante, al Ministro de Salud porque este es un tema de emergencia. Necesitamos cubrir esas camas de terapia intensiva, porque no hay intensivistas”.

Reyes Villa informó que se necesita al menos los 138 profesionales, cuyos contratos concluyeron en diciembre del pasado año. Sin embargo, el déficit en Cochabamba es de unos 920 ítems.

Dijo que la Alcaldía continuará disponiendo recursos para lo necesario; recordó que contrataron 405 profesionales en línea.

Sin embargo, enfatizó que la dotación de ítems le corresponde al Gobierno nacional. Aclaró que, de acuerdo a ley, la Alcaldía es responsable del equipamiento en los centros de salud de primer y segundo nivel; a la Gobernación le corresponde el tercer nivel; y al Gobierno nacional, los ítems.

“El año pasado se ha dado ítems a Santa Cruz; pero a nosotros, no”, expresó el Alcalde.

Añadió que, pese a las limitaciones, se prevé la implementación de más camas de terapia intensiva, haciendo un módulo en el mismo Hospital del Norte, en el segundo piso.

Reconoció también que existe deficiencia de médicos terapistas en el país.

“Es un problema serio (…). Pero, estamos viendo cómo prepararnos al futuro. No queremos tener sobresaltos como en la tercera obra, que no había la infraestructura sanitaria”.