Tras que vio la noticia en la televisión, Esther Corina supo que estaba casi frente a un milagro. Sus ojos se llenaron de lágrimas al reconocer a Gaturro, su mascota querida, la que “es todo para ella”, y la que estaba perdida desde el 13 de diciembre pasado. 

Ese instante, la alegría se mezcló con angustia. Hace más de una semana el gato atigrado se encontraba atrapado en un árbol de ceibo, de casi nueve metros de altura, al interior del colegio Instituto Americano, en la zona norte. Ella, lo único que quería era tenerlo de vuelta en casa.

RESCATE Y VOLUNTARIOS

Hace unos días, algunos padres dieron la alerta de la presencia del animal. Durante dos días, personal voluntario del SAR, Geos y Bomberos intentaron rescatar al gato, que supo zafarse de todos los intentos de rescate.

Esta mañana, Jhimmi Saigua y Daniel Américo, trabajadores de Podarte (una empresa especialista en el trepado y cuidado de árboles), se enteraron de la noticia y —ante el temor de que la intensa lluvia acaecida anoche terminara de enfermar al felino—, asumieron el reto de intentar rescatarlo.

El ascenso al árbol ocurrió al medio día, ante la mirada de los estudiantes y padres de familia. Cuando estaban a punto de atrapar al gato, se les escabulló y, prácticamente, desapareció de la vista de ambos jóvenes. Uno de ellos se percató de que el tronco del árbol centenario, tenía una cavidad interna de casi un metro de profundidad, que servía de refugio del animal.

Daniel metió la mitad de su cuerpo de cabeza y logró atrapar al gato, que ya se encontraba más cansado y con hambre, después de la prolongada lluvia. Ya, abajo, ante la alegría de los presentes, el gato fue metido a una mochila especial para evitar que se ponga nervioso y pueda escapar de nuevo.

Una señora con su hijo se ofreció cuidar al gato hasta que sus dueños aparezcan o, caso contrario, adoptarlo como mascota. 

Por su parte, la señora Esther Jordán —una señora mayor—, tras que supo del rescate, acudió al colegio, acompañada de Claudia Vargas (quien la ayuda a buscar a su mascota hace semanas) para ver al gato y confirmar lo que su corazón y su vista le muestran, que es Gaturro, el minino a quien cuida desde bebé, que es malcriado e inquieto, que tiene mal sus ojitos, pero que es su compañero y todo para ella.

Cuando le dijeron que una señora se lo llevó, no pudo aguantar las lágrimas. El guardia del colegio se comprometió a que mañana miércoles ubicarán a la señora que cuida al famosos gato rescatado. Esther tendrá que esperar unas horas más, para saber si por fin ocurrió el milagro que tanto esperaba.