El Juzgado de Instrucción Penal de Colcapirhua rechazó este miércoles la solicitud de derecho al trabajo del alcalde titular Nelson Gallinate, quien debe mantener su detención domiciliaria. La determinación ya fue apelada.

La autoridad titular tiene un proceso por supuesto sobreprecio en la compra de pruebas antígeno nasales para detectar COVID-19. El 17 de febrero, Gallinate logró la detención domiciliaria y salió de la cárcel pagando una fianza de 150 mil bolivianos.

Aseguró que es inocente. Enfatizó que el fiscal se habría basado en una cotización “inventada”, cuando el Ministerio de Salud y Deportes incluso habría determinado costos mayores para estas pruebas.

El alcalde Gallinate pidió la tarde de este 23 de marzo su derecho al trabajo, pero la respuesta fue negativa.

Eduardo Mérida, abogado de la autoridad colcapirhueña, informó que el juez expresó que “persisten los riesgos de fuga”, porque supuestamente existen indicios de corrupción.

Cuestionó que no se consideren las certificaciones en favor del titular de Colcapirhua.

Expresó que hay pruebas y testigos “sembrados”.

“Tampoco le han creído que él (Gallinate) tiene necesidad de salir porque tienen deudas bancarias (…), que tiene familia, que tiene deudas, que tiene una enfermedad de base. Solo esa necesidad era procedente”, enfatizó.

Sin embargo, el juez decidió que se mantenga la detención domiciliaria.

“El juez no está obrando con objetividad; está obrando incongruentemente, maliciosamente. Le dice ‘usted debe mantenerse detenido, porque usted sigue siendo corrupto’, cuando las pruebas dicen otra cosa”.

Mérida manifestó que apelaron la decisión y continuarán realizando las valoraciones jurídicas necesarias.

Entretanto, en la actualidad, la alcaldesa suplente temporal es Nelly Mayta, de la misma línea política de Gallinate, Comunidad Ciudadana (CC).