Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
  • Actualizado 18:32

Coronavirus cobró la vida de al menos 14 músicos

Algunos superaron la enfermedad, pero la crisis económica los obligó a migrar a por lo menos cuatro rubros como el delivery.

Una agrupación musical durante una presentación en una serenata de Cochabamba. DICO SOLÍS
Una agrupación musical durante una presentación en una serenata de Cochabamba. DICO SOLÍS
Coronavirus cobró la vida de al menos 14 músicos

El coronavirus no solo bajó el telón de los espectáculos musicales, también cobró la vida de personas destacadas en ese ámbito. El Movimiento Cultural Cochabamba calculó que al menos 14 músicos perecieron desde el brote de COVID-19 en Bolivia.

Si bien la enfermedad puso pausa a la actividad musical, muchos artistas no podían quedarse en casa esperando a que la situación se normalice para volver a generar recursos económicos; la mayoría se vio obligado a incursionar en al menos cuatro rubros para sostener sus familias: la gastronomía, el delivery, hicieron de choferes de taxi y vendedores de insumos médicos.

Christian (Choco) Rodríguez, representante del Movimiento Cultural Cochabamba, contó que es quizá ese contexto el que provocó contagios y fallecimiento en las filas musicales.

Mencionó que este rubro perdió hace poco al director de la Orquesta Sinfónica Juvenil de Bolivia, Randolph Ríos, que pereció en enero a causa de secuelas que dejó el coronavirus en su organismo. “Hemos perdido un gran valor”.

A la lista se suma el guitarrista de la agrupación Kalamarka, Juan Carlos Ríos, cuya vida también fue apagada por el virus.

Aníbal Acuña, la primera voz de los Cantores Camargueños, de la misma forma pereció debido a COVID-19, por mencionar solo algunos artistas.

SUPERARON EL MAL

Hay otro segmento de artistas que también se infectó, pero “tuvo la suerte de contar con recursos económicos” para acceder a una atención y un tratamiento médico inmediato.

Entre ellos están el exbaterista de la agrupación cruceña Track, Jorge Jordán, quien en diciembre de 2020 se encontraba intubado en la clínica San Isidro y su familia requería hasta 7.000 bolivianos al día para comprar medicamentos.

Otros vencedores de la enfermedad son la cantante Eleonora Cardona, Fernando Torrico (Ex Tupay), Carlos Urquidi (del grupo Waliki) y el propio Christian Rodríguez (también de Waliki).

SITUACIÓN

Si bien la cuarentena se flexibilizó en el país, la situación no es de las mejores para este rubro.

Hasta ahora, solo se realizaron espectáculos transmitidos en vivo, pero no fueron muy exitosos porque la gente “no está acostumbrada a pagar una entrada por internet”. Según Christian, solo Octavia hizo streamings (transmisión en directo) exitosos en el país.

Los eventos masivos están descartados en el país, pero el rubro analiza emular espectáculos como en Europa, con distanciamiento social entre los asistentes. Esto implica que las ganancias serán 50% menos que antes.

EXPOSICIÓN

Christian indicó que los músicos están muy expuestos, pero desatendidos. Una vez que reinicien los shows, estarán en contacto con el público y pueden infectarse.

A esto se suma que “viajamos mucho” y no están exentos de accidentes, por esa razón la mayoría se afilió al Sistema Único de Salud (SUS).

Christian es un testimonio vivo de esta exposición constante. Hace nueve años se encaminó hacia un festival en Chile, junto con su agrupación llamada Camargo. La movilidad en la que iban sufrió un accidente y dos integrantes fallecieron, “el tercero en irse tenía que ser yo”, dijo Christian.

Estaba en terapia intensiva y no tenía cómo cubrir los gastos médicos. Su cuenta era de aproximadamente 100 mil bolivianos.