Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
  • Actualizado 10:28

SE ADAPTAN A LAS CONDICIONES

Aves rapaces toman 6 puntos urbanos atraídas por presas

Halconcitos y gavilanes son las más comunes. Están por inmediaciones de la UMSS y el Parque La Torre, entre otros sitios.

Un gavilán descansa en la rama de un árbol de la plaza 14 de Septiembre.      DICO SOLÍS
Un gavilán descansa en la rama de un árbol de la plaza 14 de Septiembre. DICO SOLÍS
Aves rapaces toman 6 puntos urbanos atraídas por presas

Mientras la cotidianidad urbana transcurre por los suelos qhochalas, un poquito más arriba, por los aires citadinos, hay una cacería iniciada por aves rapaces. Esto sucede en al menos seis puntos de Cochabamba, donde proliferan halconcitos y gavilanes, entre otras especies cazadoras, que se ven atraídas por diferentes presas.

Estas aves de caza utilizan su pico y sus garras afiladas para capturar, sobre todo, palomas y roedores, entre otros animales.

Tras atraparlos, engullen a sus víctimas a vista de los transeúntes, en balcones y tejados de edificaciones cercanas.

La jefa del área de Ornitología del Museo de Historia Natural Alcide d'Orbigny, Cindy Veizaga, explicó que proliferan, sobre todo, en seis puntos de la urbe: la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), el Parque La Torre, el Museo Alcide d’Orbigny, el Centro Simón I. Patiño, la plaza 14 de Septiembre y el aeropuerto Jorge Wilstermann.

Generalmente, buscan lugares donde hay árboles altos para posarse y desde ahí buscar su alimento. 

Otra especie de caza que fue avistada en la ciudad de Cochabamba es la lechuza de los campanarios (tyto alba).

Veizaga aclaró que estas rapaces no fueron desplazadas, es su área de distribución, “pero sí muchas especies de aves han tenido que adaptarse a ambientes urbanos (…)”.

CASOS Desde la Organización No Gubernamental (ONG) Jóvenes Ambientalistas por Bolivia remarcaron que estas aladas “no son de mal augurio”.

Esta aclaración fue hecha a propósito de un caso reciente, ocurrido en La Paz. Un gavilán hembra fue visto devorando una paloma en la plaza Murillo.

La gente se alarmó y, en criterio de la ONG, el ave simplemente “estaba alimentándose de manera natural”. Recuerda que ellas son aves de presa y para sobrevivir cazan a otros animales”.

Instaron a la ciudadanía a “dejarlas tranquilas, no someterlas a estrés con gritos, sustos o pedradas, ni mucho menos pedir que se las atrape”.

En respaldo, Veizaga dijo que hay muchos beneficios que dejan estas aves de caza. “Son importantes por el rol ecológico que tienen: son controladoras biológicas y nos ayudan a que no nos llenemos de plagas”.