El colectivo No a la Tala de Árboles sigue a la espera de que la Alcaldía de Cercado entregue un plan para el trasplante de los 44 árboles que serán extraídos de la avenida Uyuni y Melchor Urquidi para concluir la segunda fase de la construcción de corredor Quintanilla.

Luego de una jornada de conflictos el pasado lunes entre los constructores del proyecto y activistas, se instaló una mesa de diálogo para llegar a un acuerdo sobre el tratamiento que le darán a las especies que será afectadas por la obra.

La vigilia lleva más de 50 días vigente y tiene el objetivo de que el daño ambiental sea el menor posible, tanto para la zona como para la ciudad.

Rocío Estremadoiro, miembro de colectivo, aseguró que el martes se entabló la mesa de diálogo con el subalcalde la comuna Adela Zamudio, Miguel Saucedo, en la que hicieron conocer todos los puntos que observan en la obra.

“Desde octubre venimos pidiendo que nos muestren documentación del proyecto y no hemos recibido respuesta”, afirmó.

Entre los puntos más destacados de la reunión, la Alcaldía determinó trabajar un plan de trasplante, pues hasta el momento no existía ni estaba contemplado dentro del proyecto inicial.

De los 44 árboles que serán afectados, 36 será trasplantados, pero aún se desconoce dónde serán llevados, cuándo y cómo. “Nosotros sabemos que trasplantar es un procedimiento bien complejo, difícil, delicado y costoso. Se tiene que evaluar árbol por árbol, hay un tratamiento previo y posterior. Nosotros les preguntamos dónde estaba el plan de trasplante, al ser un procedimiento tan difícil, y sucede que no tenían. Admitieron la improvisación y falta de planificación”, explicó Estremadoiro.

En dicha reunión determinaron que los activistas serían parte del proceso de planificación, pero aún no los convocaron. “Queremos un documento escrito donde, científicamente, se asegure que el trasplante va a ser para que vivan los árboles, porque si van a morir no sirve de nada. Les recalcamos la experiencia de la primera fase, donde, de 23 árboles trasplantados, 17 murieron”, añadió.

Si bien se abrió un canal de comunicación entre ambas instancias, los activistas reclaman la falta de documentación que garantice y respalde la defensa de las especies.

OPINIÓN intentó contactarse con el subalcalde la comuna Adela Zamudio, pero no recibió respuesta. Por su parte, el secretario de Desarrollo Sustentable del municipio, Elvis Gutiérrez, indicó que están plena elaboración del plan. “Están trabajando en eso, hay solamente lo que es la parte primera de la ficha ambiental y están trabajando con el resto”, afirmó Gutiérrez.

“Estamos como al principio, no hay nada tangible, ni institucional, ni escrito que garantice la vida de los árboles. La reposición de especies de la primera fase está incompleta, entonces qué nos asegura que en esta fase lo harán bien”, recalcó Estremadoiro.

La Alcaldía de Cochabamba difundió el miércoles un spot en el que el alcalde Iván Tellería asegura que ya comenzó la segunda fase del proyecto y que cuenta con licencia ambiental. “Hay el presupuesto para trasplantarlos, hay presupuesto para que, nosotros como municipio, resguardemos a cada uno de esos arbolitos, y también hagamos la reposición”, informa Tellería en el video.

Sin embargo, varios miembros del colectivo No a la Tala de Árboles manifestaron su enojo porque indicaron que aún no se ha llegado a ningún acuerdo.

“Nos parece desleal que saquen propaganda diciendo que el tema ya está resulto cuando no hay un solo papel que garantice la vida de esos árboles, y que además diga dónde”, dijo Estremadoiro.