En las últimas semanas se vieron largas filas de vehículos en surtidores a la espera de compra de gasolina y diésel, pese a que la estatal petrolera garantizó la provisión con mayores despachos y una intensa fiscalización que descubrió hechos como el desvío de hidrocarburos a actividades ilícitas y cobros irregulares.
En conferencia de prensa, autoridades de la estatal manifestaron que no "van a dejar pasar las irregularidades".
La denuncia fue presentada el jueves en la noche por personal del departamento Jurídico de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), luego de verificar el faltante.
El juzgado de Ivirgarzama emitió el fallo y los encontró culpables de incumplimiento de deberes y conducta antieconómica.
“Tenemos la total seguridad de poder tener un abastecimiento pleno en los siguientes días y dentro del plan que tenemos en un mediano y a largo plazo”, afirmó el vicepresidente Nacional de Operaciones de YPFB, Luciano Montellano.
Se trata de un reinicio de venta de excedentes de GLP a la estatal Petróleos Paraguayos. Los equipos técnicos de ambas petroleras realizaron gestiones previas para la entrega del producto.
Dorgathen agregó que, el objetivo es masificar el uso del gas natural. “Hemos llegado hasta los últimos rincones del país, donde no llegan los gasoductos convencionales; hemos contribuido, a familias enteras, pasar de la leña al gas natural. Estamos en los cuatro puntos cardinales del país”.
En otro acápite del documento señala que "el lunes se remitirá la reanudación de cargas a las empresas suspendidas de sur-oriente".
La medida se impulsa en pleno feriado y en el eje troncal se advierte que no hay filas ni falencias de abastecimiento, salvo algunas excepciones.
“Dar tranquilidad a la población, no es necesario hacer filas, el combustible está garantizado”, enfatizó, la directora distrital de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Wendy Villarroel.
La “especulación” y los problemas de “logística” en la distribución del combustible fueron los causantes de las largas filas reportadas desde el jueves pasado en Cochabamba. YPFB y la ANH aseguraron el normal suministro y descartaron la escasez del carburante.
La denuncia fue presentada en mayo por los exministros Teresa Morales y Carlos Romero, quienes acusaron a YPFB de comprar combustible con sobreprecio y con favorecimiento a determinadas empresas.