Entre estos trabajos, bomberos y funcionarios de Protección Civil continuaban la búsqueda de los 11 desaparecidos, mientras que voluntarios de la Cruz Roja y paramédicos prestaban servicios de salud a lesionados y enfermos.
 

Uno de los miembros del directorio de la Asociación Gremial Latinoamericana de Cementerios y Servicios Funerarios (Alpar), Nicolás Andrade, apunta uno de los problemas latentes en Sudamérica, donde Bolivia vive uno de sus peores momentos en la pandemia, es la acumulación de...

El camposanto público de este municipio recibe hasta cuatro entierros en algunas jornadas. Antes de la pandemia, el promedio era de dos inhumaciones a la semana.

Quillacollo tenía uno a la semana, ahora suma cinco. Lo propio ocurre en los camposantos particulares. En Cercado analizan la implementación de un nuevo horno crematorio.

El secretario general del municipio reiteró que el ingreso al Cementerio General es solo de lunes a miércoles y según terminación numérica del carnet de identidad.

La demanda de inhumaciones e incineraciones es de ocho a diario en el campo santo del municipio de Cochabamba; la cifra alcanzó a unas 23 al inicio de la segunda ola de la pandemia.

La administración recibe cuatro solicitudes de incineración; antes eran 15. Se realizan seis entierros y anteriormente eran hasta 17. Junio y julio fueron los meses con mayor demanda.

 

Denunció que el cementerio de Sacaba realizó el cobro correspondiente, pero debido a la saturación por la pandemia no cumplieron.