Washington les acusa de haber participado "en una conspiración que desplegó programas informáticos malignos (...) para el beneficio estratégico de Rusia a través de acceso no autorizado" a los ordenadores de las empresas víctimas.
Hernández, cubierto su rostro con mascarilla, lentes claros, sin esposas y saludando con su mano derecha, ingresó fuertemente resguardado por policías a la sala del Supremo donde le esperaba un juez y su equipo.
Esta cifra de fallecidos se produce horas después de que EEUU rebasara los 50 millones de contagios desde el inicio de la pandemia.
Brooks fue detenido por la Policía el domingo pasado, poco después de embestir con un todoterreno rojo a la multitud congregada para un desfile navideño en Waukesha.