La protesta partió de la avenida Panamericana, a tempranas horas de este lunes, a pesar de que el alcalde Manfred Reyes Villa aclaró anteriormente que se trata de un complejo industrial y un proyecto a largo plazo. Los lugareños no quieren un "basurero".
La medida rige desde hoy lunes. El sector demanda dialogar con el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa. De lo contrario, no levantará la medida de presión.
Tras el convenio, firmado entre el alcalde de Quillacollo, Héctor Cartagena, concejales, Control Social y pobladores del Sindicato Agrario de Jawintiri se estableció que el botadero operará 75 días más. Tras ello, una empresa privada ingresará a realizar el tratamiento adecuado de la basura, previa licitación abierta.
De no ser escuchado, el sector amenaza con “tomar” las instalaciones de la empresa, actual operadora del relleno sanitario de K´ara K´ara.
El centro y sur de la ciudad presentan piquetes de presión. Los sectores movilizados amenazaron con “masificar” las medidas con todas sus bases. Piden tomar recaudos a la población debido a que el botadero está cerrado y las avenidas Aroma, Ayacucho y Petrolera reportan interrupción de vías.