Día 215 de pandemia, volvimos a clases. Realmente fue una buena idea poner un almohadón nuevo en la silla del escritorio.

Esto sonará confuso, pero más de uno lo entenderá por todas las horas que pasamos frente a la computadora, quizás los ojos ya no son lo mismos. Tal vez, y solo tal vez eso es lo que hace que estos ojos ya no vean lo mismo.

Hace unos meses todo parecía una broma, pero hoy el chiste ya perdió sabor. Al principio no sabíamos quién estaba más perdido: si los docentes o los estudiantes. Sin embargo, esta semana fue muy diferente.

Los docentes parecen haber absorbido todo el Internet en ese mes de vacación. Ahora parece que estamos literalmente en una carrera virtual de 100 metros planos, es una prueba de velocistas en la que por unos segundos se ponen a prueba los momentos más difíciles de entrenamiento, parece que los docentes se emocionaron con este retorno a clases para poner en práctica el entrenamiento que tuvieron. Pero ojo, no fueron los únicos, ahora más que nunca, con la marca de sudor en la frente, sentimos que estamos más cerca de romper esas barreras comunicacionales y eso que apenas vamos una semana. En clases veo más risas y sonrisas con un toque de sed de conocimiento.

Así es como estamos: con ganas de comer el mundo y dispuestos a llegar juntos a la meta. Pero, ¿a quiénes me refiero cuando digo “juntos”? Pues este nuevo semestre nos enseña una nueva relación de compañerismo entre estudiantes y futuros colegas, que ahora son nuestros docentes.

Las plataformas han mejorado, la dinámica de clases ha cambiado y parecería que todos quieren entrar tarde a clase para contar un chiste y romper el hielo. Toda esa monotonía se fue en un abrir y cerrar de ojos gracias a los nuevos y constantes retos que nos presentan nuestras amadas plataformas.

Sí, quizá se emocionaron con las tareas en la primera semana, pero no podemos negar que hay una diferencia al echarte a ver Netflix con la satisfacción de haber acabado tus tareas (aunque sea hasta mañana). Estamos empezando un nuevo semestre, son nuevas materias, nuevos compañeros y sin duda nuevos retos y metas.

La vida siempre tuvo ese picantito que aquí tanto nos gusta, entonces ¿no crees que es mejor ver esto así? porque tenemos dos opciones: o lo vemos como un “mientras más pronto empieces, más pronto acabas”. O, por otro lado, lo vemos como un nivel extra en el juego de tu vida. Si no quieres que este sea un Game Over, entonces arriésgate y get up, clear you’re desk, tie your hair and press Start.

VALERIA LOURDES RÍOS NAVIA

Estudiante de Comunicación Social UCB.SP

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