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  • Diario Digital | sábado, 20 de abril de 2024
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Diez años de ánimo y confianza

Diez años de ánimo y confianza

Esta semana se cumplieron diez años del pontificado del Papa Francisco. Fueron años que cambiaron la imagen de la Iglesia Católica en el mundo. Al mismo tiempo fueron diez años intensos para la humanidad, a nivel político y social: guerras y conflictos, amenazas a la democracia, la crisis climática, desastres naturales y la pandemia del Covid-19 afligieron a millones de personas. El Papa respondió a todos estos desafíos con responsabilidad y preocupación. 

Destaca su llamado a asumir el reto ecológico. A diferencia de otros actores, el Papa llama a enfrentar esta crisis desde la perspectiva de los pobres. Impresiona su preocupación por la Amazonía. “Nos salvaremos todos o nadie” es un lema suyo que volvió a emplear durante la crisis del Covid-19. 

Se convirtió en un líder confiable, un abogado de las regiones del planeta olvidadas por los poderes imperantes. Al mismo tiempo, a lo largo de cada uno de estos diez años, el Papa siempre aboga por el diálogo y la paz, tratando de negociar entre las partes en conflicto y de establecer lazos de solidaridad. 

En todo ello practica lo que llama “una Iglesia en salida”: una Iglesia al servicio de la humanidad, especialmente de las personas más vulnerables. Es una Iglesia que no se preocupa por sus propios derechos y privilegios, sino por los derechos humanos y las necesidades de los que sufren. Es una Iglesia que toma en serio el ejemplo de Jesucristo que quiso que todas las personas tengan la vida en abundancia. 

Durante su viaje a Bolivia, el 2015, el Papa dijo, dirigiéndose a líderes de organizaciones sociales: “Ustedes pueden y hacen mucho. El futuro de la humanidad está en sus manos, en su capacidad de organizarse y promover alternativas creativas.” Esta confianza que tiene en toda la humanidad, en todos los pueblos y en cada persona, es emblemática. El destino de la humanidad no depende únicamente de las decisiones de algunos poderes anónimos en el Norte del planeta, sino de todas y de todos.

“Ánimo, levántate”, dijo el Papa el mismo 9 de julio de 2015 en Santa Cruz. Si cobramos ánimo y nos levantamos para expresar nuestros deseos y para participar en la construcción de nuestro propio destino, realizaremos el mundo de fraternidad y de solidaridad que el Papa Francisco proclama.

UN POCO DE SAL

STEFAN SILBER

Teólogo laico 

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