Opinión Bolivia

  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
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Y si fuera ella

Y si fuera ella

Desde hace algunos días atrás, fue circulando en las redes sociales el hashtag #YSiFueraElla?, impulsada por el entorno cercano a la presidenta Jeanine Áñez, con una clara intención de evaluar las reacciones mediáticas -a modo de globo de ensayo- y, por otro, testear las probabilidades de posicionamiento y adhesión de los cibernautas, hacia una eventual candidatura para los comicios generales del 3 de mayo. 

Los esfuerzos desplegados por lograr la pacificación, la convocatoria a elecciones con un nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE), la gestión de fiscalización al anterior gobierno; la buena imagen que fue construyendo durante este tiempo y las muestras de apoyo de varios sectores de la ciudadanía, fueron, en definitiva, los factores que motivaron a hacer pública su postulación a la Presidencia, con la alianza política “Juntos”, conformada por los Demócratas, Soberanía y Libertad (Sol.bo.), Unidos para Renovar (Unir), la agrupación Todos de Tarija, además de otros frentes regionales.

El anuncio causó sorpresa en la clase política que rápidamente cuestionó su falta de ética y el riesgo de la gestión de transición. Incluso, el diputado Luis Dorado, aliado de Fernando Camacho, anunció que realizará una consulta al TCP para hacer efectiva su renuncia. Sin embargo, al igual que lo hiciera Evo Morales, la Presidenta goza de privilegios constitucionales, no existiendo ningún artículo de la CPE que la obligue a renunciar mientras sea candidata.

Lo cierto es que la Mandataria modifica drásticamente el mapa político y el escenario electoral que, desde ya, avizora tendencias de atomización del voto. Sea cual fuere sus motivaciones, deberá tener cuidado de no hacer uso de bienes públicos para su campaña proselitista, como lo hiciera Morales y, principalmente, respetar la independencia del TSE. 

Posee un interesante perfil político, carisma y popularidad que la catapulta al ruedo electoral con amplias perspectivas de aceptación y concentración del voto; además de abrir la posibilidad de lograr la unidad y adhesión de las otras fuerzas políticas. Señal clara de ello es que deja en suspenso quién será su acompañante; quizá en la esperanza de lograr acuerdos con alguna de las alianzas; aunque de no efectivizarse, podría ser Luis Revilla, además de otras personalidades como Karen Longaric, Iván Arias y Rafael Quispe (...).