¿Democracia, anarquismo, federalismo?
Lewis Henry Morgan fundó “La orden del nudo gordiano”, de inspiración griega, en 1851, pero un año después se llamó “La gran orden o nueva confederación de los iroqueses”, gracias a los estudios de antropología que hizo sobre la Liga iroquesa, la confederación que agrupaba a cinco naciones: mohawk, oneida, ononfaga, cayuga y seneca; y que luego incorporó a su seno a una sexta nación. Lo colaboró Ely S. Parker, hijo de un jefe de la nación seneca, que sirvió más tarde como teniente coronel en el ejército de Grant durante la guerra de Secesión y luego fue nombrado Comisionado para los Asuntos Indígenas.
La confederación se disolvió en 1847, pero Morgan publicó un estudio acerca de ella en 1851: The League of the Ho-dé-no-sau-nee, or Iroquois, basado en temas como religión, arquitectura doméstica, gobierno y organización social, cultura material, lenguaje y nombres de lugares, etnobotánica y otros de la cultura iroquesa.
El interés de Engels (y de Marx) en los estudios de Morgan se refleja en este pasaje: Morgan, que pasó la mayor parte de su vida entre los iroqueses establecidos aún actualmente en el Estado de Nueva York y fue adoptado por una de sus tribus (la de los senekas)… ¿Qué era la Liga Iroquesa y a qué instituciones occidentales dio origen? En esta cultura está el origen de instituciones tales como la democracia, el anarquismo y el sistema federal. En realidad, Morgan no fue el único ni el primer norteamericano de origen inglés que estudiara a la Liga Iroquesa, pues lo hicieron Benjamin Franklin y Thomas Paine, dos protagonistas de la creación de los Estados Unidos, que adaptaron la democracia, el sistema federal iroqués y otras instituciones a la Constitución todavía vigente con enmiendas de ese país. A ello añadiríamos la noción de hegemonía, tal como es visible hoy en el rito del powwow, una celebración indígena en la cual “nadie está al mando”. Esto parece típico en los acontecimientos de la comunidad indígena: nadie está al mando.
Germán Arciniegas, en su libro Biografía del Caribe, traza la enorme influencia que ejerció la primera descripción de Colón y los textos de los cronistas en pensadores como Thomas Moro con su Utopía, Rousseau con el mito del buen salvaje, Swift con los Viajes de Gulliver y Montaigne, entre muchos otros.
¿La democracia, una institución griega? Así parece desde la etimología de la palabra; pero un antropólogo dice que democracia, anarquismo y federalismo son instituciones de la Liga Iroquesa, que estudiaron funcionarios coloniales ingleses y los incorporaron a la Constitución de EEUU.
OJO DE VIDRIO
RAMÓN ROCHA M.
Escritor, abogado, “cronista de ciudad”