Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
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La conciencia y dignidad del pueblo boliviano

La conciencia y dignidad del pueblo boliviano

Volviendo al tema, pregunté a familiares, amigos, conocidos y vecinos si fueron visitados o llamados telefónicamente para encuestarles sobre su preferencia electoral y la respuesta reiterada fue un NO rotundo.

Adhiero a la columna del sociólogo, periodista e investigador César Arellano que escribe: “Las encuestas “mediáticas” no son instrumentos de investigación, sino recursos de mercadeo político que buscan incidir de determinada manera en la opinión pública y que tienen escaso valor científico”.

Ciesmori, como Ipsos o Captura, presta el servicio -bien remunerado- al cliente que lo contrata, como cuando pretendió instalar mediáticamente el 2016 que el sí del masismo ganaría en el Referéndum del 21F. Fue el principio del fin.

¿Cómo sería posible que apenas 2.000 personas, entre más de siete millones de votantes, perciban o adivinen lo que decidiremos el 18 de octubre, en las elecciones más importantes del siglo?

Claro que no es necesario encuestar para saber que la mayoría desconfía y hasta está decepcionada de los candidatos que considera anodinos, porque no despiertan entusiasmo alguno y hubieran preferido un frente amplio, del campo democrático.

Pero de ahí a creer que el pueblo es masoquista y que apoyará, por ejemplo en Potosí, el retorno del autoritarismo, es una exageración y falta de respeto total.

Sin embargo, las encuestas que para algunos son un termómetro del momento, sirven para constatar que el abrumador respaldo masista, -incluido el fraude sistemático- se desplomó a menos de la mitad, por lo que es imposible que gane en la próxima elección improvisada.

El trabajo de octubre y noviembre está inconcluso o truncado, por una mala gestión de un minúsculo grupo político que abusó de la confianza y encima cree que ofertar bonos es un programa de gobierno; preferible es abrir una expectativa, aunque sea matizada de soberbia.

El gobierno que elegiremos será transitorio, con grandes desafíos, para recuperar la institucionalidad perdida y sumida hoy en la más vil corrupción y retroceso.

La conciencia y dignidad del pueblo prevalecerán, y la llave que tenían los candidatos que solo ven sus intereses, será utilizada por la mayoría que cumplirá su deber patriótico, pensando en Bolivia, los hijos y los nietos.

MOISÉS REVOLLO

Periodista deportivo

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