Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
  • Actualizado 00:06

Arquetipo de la gestión pública de excelencia

Arquetipo de la gestión pública de excelencia

En mayo de 1994, por intermedio de mi querido profesor Roberto Pavisic, fui invitado cordialmente a trabajar en la gestión de Manfred Reyes Villa, elegido por primera vez Alcalde Constitucional, por abrumadora mayoría de votos, dando fin a una profunda crisis municipal y dar comienzo a una etapa inolvidable.

Sin haber militado nunca antes en partido político, luego de dos años trabajando en el área deportiva, sin que nadie me lo pida, resolví adherirme a Nueva Fuerza Republicana, convencido de que el liderazgo emergente, no solo cambiaría positivamente Cochabamba, sino también Bolivia en su momento.

Ganó ampliamente otras elecciones para Alcalde, postuló a la Presidencia el año 2002 en que Sánchez de Lozada torció la historia para mal; venció contra muchos pronósticos, en las primeras elecciones para Prefecto, cargo que no lo dejaron terminar, por la lucha hegemónica del masismo que no admite competencia.

Después de 10 años de ausencia obligada, pensando que las condiciones en el país habían mejorado,  retorna y se hace realidad el sueño de muchos. Con ese carisma intacto, vuelve a vencer por mayoría incuestionable, recibiendo un voto masivo de confianza y esperanza.

Hoy se cumplen seis meses de una gestión para cinco años y Cochabamba siente que tiene un alcalde de verdad, después de largo tiempo sin rumbo.

Si viviéramos tiempos normales, de respeto a la Democracia, estaríamos seguros de que será una gestión de buenos resultados, con sensibilidad social y vocación de servicio, que es la marca manfredista, que se refleja y comenta a nivel nacional.

Lamentablemente, se perciben alarmas que generan incertidumbre en todo el país, porque una mitad pretende imponer o aplastar a la otra mitad, avasallando la justicia como instrumento de confrontación e inseguridad.

Por eso, preocupa que el gobierno persista en su afán cataclísmico, sin importarles que provocarían una crisis de grandes proporciones que nuevamente perjudicaría catastróficamente a la ciudad que merece este conductor, que garantiza otra época de progreso en todas las áreas, como se constata diariamente en las actividades diversas que realiza, el arquetipo de la gestión pública de excelencia, con un respaldo de tres cuartos de la población, de acuerdo a la última consulta.

Mis circunstancias

MOISÉS REVOLLO 

Periodista deportivo

[email protected]