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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 19:57

De porno, la internet y la tecnología digital

De porno, la internet y la tecnología digital

Muchas personas se sorprenden y agradecen cada vez que hay un avance de la tecnología digital. El mundo de posibilidades nos hace imaginar diferentes escenarios en los que el próximo desarrollo podría cambiar el destino de nuestra existencia. De hecho, es una época muy emocionante para vivir si eres un fanático de la tecnología, pero no eres muy hábil en el desarrollo ya que existe un aumento de la accesibilidad de las tecnologías impulsadas por el aprendizaje automático con las que se puede jugar.

Por ejemplo, creando sitios webs o aplicaciones, falsificaciones profundas o deepfakes.

Una Deepfake es un video manipulado producido por inteligencia artificial sofisticada, que crea imágenes y sonidos fabricados que parecen reales para el ojo desprevenido. Y aunque puede parecer un mal chiste, se cree que estos videos tienen una gran influencia en las elecciones y la política internacional al ser tan fácilmente reproducibles y tan difíciles de reconocer para una persona común. 

De hecho, el potencial es tal, que empresas como Facebook están financiando investigaciones para hallar la mejor manera de reconocer estos videos de forma automática, e interceptarlos antes de que generen efectos sociales y políticos a gran escala o contribuyan a la desinformación. Por supuesto, hay mucho que decir de este tipo de investigaciones y el poder de estas empresas, pero esa no es mi intención en este momento. Porque contrariamente a lo que mucha gente pueda pensar, los más afectados no son los políticos, sino las niñas y las mujeres. 

¿Sabías que el 96% de las deepfakes son pornografía?

Muchos de los videos íntimos que vemos transmitidos en las redes sociales y los grupos de WhatsApp son en realidad videos manipulados hechos por cualquiera que pueda usar un sitio web o una aplicación muy accesible. Sí, se han desarrollado muchas aplicaciones para crear imágenes desnudas de cualquier imagen cargada, lo cual es intrínsecamente una violación de la intimidad. Sin embargo, este tipo de tecnología popular está dirigido exclusivamente a manipular las imágenes e intimidad de mujeres. No estoy exagerando ni dramatizando. Estas aplicaciones han sido diseñadas de tal manera que no pueden desnudar a los hombres porque su código está programado únicamente para identificar y reproducir imágenes de mujeres. Por supuesto, las ciudadanas normales como yo podemos ser fácilmente un blanco de este tipo de uso de la tecnología, pero la evidencia muestra que los blancos más frecuentes de esta violencia son 10 mujeres en el mundo cuyos nombres, por privacidad y principios feministas, no serán divulgados.

Y a mí, qué me importa dirán; pero les importa. Primero, porque está demostrado en un metaanálisis de 135 estudios, que la pornografía genera que los varones deshumanicen a las mujeres y sean más propensos a ser violentos contra ellas. Segundo, porque la edad media de primer contacto con la pornografía es a los 13 años, habiendo contactos tan tempranos como a los 6 años. Tercero, porque no quieres que ni tu hija crezca siendo deshumanizada y con depresión, ni que tu hijo crezca para ser un violador. Las razones son incontables, así que les importa, o debería.

Pero, ¿y ahora qué?

Lo bueno de la organización feminista es que nos hemos vuelto muy hábiles y tenemos muchas herramientas para contrarrestar la violencia contra las mujeres. Pero para hacerlo es necesario un esfuerzo coordinado entre el Estado, la sociedad civil, las organizaciones internacionales y la ciudadanía. Necesitamos un plan sólido para sentar las bases de la ciudadanía digital que pueda prevenir una mayor expansión de la violencia digital contra las mujeres, y empoderarnos como usuarias y productoras; además de un plan de Educación Sexual Integral. Sancionar no siempre es la respuesta si no se cuenta con tecnología digital, con un enfoque ético y centrado en el ser humano. Tenemos mucho trabajo por hacer en esta alianza, ¡es mejor que comencemos pronto!

FORO FEMINISTA

María Belén Luna Sanz

Politóloga y feminista que trabaja en Género y Tecnologías

[email protected] Twitter:@labluetuitea