Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 25 de abril de 2024
  • Actualizado 00:06

Erika y Esmeralda son dos niñas que viven en la localidad de Ancoraimes, a orillas del Lago Titicaca. Hace años, armaron un brazo robótico con una botella de plástico y tubos de suero con la brillante ayuda de su profesor de colegio. Facebook se enteró de esto y de que en Ancoraimes no había internet. 

Al tiempo, Facebook contrató una productora local para filmar un video con esa historia. La historia de dos niñas que son capaces de crear más allá de las limitaciones tecnológicas. Al final del spot, la pregunta: ¿te imaginas lo que harían si tuvieran internet? Esta fue la presentación de internet.org, una iniciativa de esta empresa para dotar de internet y acceso gratuito en zonas alejadas y que estuvo en el país por un tiempo.

Este tiempo ha despertado a los “expertos en brecha digital” que apuntan a las personas que no tienen dispositivos, o que están alejadas de los puntos de conexión. Nada nuevo bajo el sol. En 1979, con la incipiente llegada de la TV a Bolivia, las televisoras universitarias comenzaron a operar bajo la promesa de generar contenidos educativos en su señal. Cuatro décadas atrás tratando de llevar y sobrellevar la brecha y la educación. Hasta anacrónico, pero sí hay que que destacar que TVU en Cochabamba, va a transmitir contenidos para capacitar a docentes en el uso de tecnología.

Una profesora en Argentina se volvió viral por transmitir sus clases por radio y llegar a los estudiantes que no tienen acceso a internet. Mientras escribo estas palabras, la Agetic lleva a cabo un conversatorio sobre los desafíos de los docentes de la educación media en escenarios digitales. Ideas, conceptos, propuestas y mucho cariño al trabajo docente. 

En conclusión, se requiere de actitud propositiva. Un ejemplo de ello, es que si navegas por boliviasegura.gob.bono consumes datos gracias al convenio entre el Estado y las telefónicas. Ahí un buen ejemplo de cómo colaborar. Por lo mismo, pedir internet gratis o a estas empresa es no entender el cómo llega internet al país y el pago que se realiza por tráfico internacional.

Por eso, dos ideas simples: una plataforma de contenidos educativos en formato colaborativo con docentes del país, en una nube nacional de múltiple acceso. Algo como Wikipedia, pero “hecho en Bolivia”. Esto sí podría tener acceso gratuito porque es internet local. En la misma línea, una academia de capacitación permanente a docentes en uso de tecnología, también compartida y con ejemplos creados por los mismos profesores.

Hay que destacar el ejemplo de Perú. Si visitan aprendoencasa.pe descubrirán cómo el colegio sigue funcionando desde todas las aristas (internet, radio, TV). Al final del día este ejercicio no solo tiene que ver con digitalizar, sino con desarrollar personas por un mundo mejor.