Opinión Bolivia

  • Diario Digital | miércoles, 24 de abril de 2024
  • Actualizado 00:15

Este lunes comienza el día 1. Más de 60 días bajo cuarentena han sido suficientes para resignificar el todo desde el encierro. Tiempo y palabras suficientes para preguntarse ¿y ahora qué?, ¿con qué nos vamos a enfrentar?, ¿qué es lo que viene? Quiero darte 5 ideas para enfrentar este proceso desde donde estés.

Uno. Repensar a la ciudad a escala humana. Hecha para personas y no para autos. Que las autoridades estén diseñando planes para ciclorrutas es un gran inicio. Salir a las calles en bici siempre será un acto revolucionario. Finalmente, la bicivilización llega a regañadientes pero la verás ahí afuera cuando salgas. Respétala. Adóptala. Contaminación, bocinas y motos roncadoras deberán ser un mal recuerdo del pasado. Muévete en bici.

Dos. Se acabaron las 8 horas de trabajo. Empieza a considerar una cultura laboral basada en resultados, objetivos, alcances y proyectos. Qué buen momento para digitalizar procesos y volver más eficiente a las organizaciones empezando por la tuya. Si antes la frase era “esta reunión pudo ser un mail”, ahora será: “esta sesión de Zoom pudo ser un mensaje”. Sé un líder digital. Colabora, facilita, desarrolla. Y sobre todo, considera nuevas estrategias de trabajo combinando el formato presencial y virtual.

Tres. No dejes de aprender. No dejes de darle un lugar especial a la educación. Mira cuántos cursos han aparecido. Flexibilizar la cuarentena no significa que se abrirán los centros de estudios. Para eso está internet. Ese fue siempre su objetivo. Ahora las redes sociales están cobrando su real sentido cuando puedes asistir a charlas en vivo con temas de interés para seguir aprendiendo. Como docente, siento que por primera vez hay un valor agregado en los diplomados nocturnos. Me parecía agotador que un alumno salga a las 22:30 de clases para llegar a medianoche a casa. Finalmente, el sistema universitario se adaptará a la realidad del tiempo y las distancias versus lo digital.

Cuatro. Mira desde otra óptica. No volverás a lo mismo, por lo tanto, no añores ni pidas o mucho menos compares con el antes. El futuro se mira desde la gran ventana delantera y no desde el retrovisor. Siéntate con tu equipo, tus compañeros, tu entorno, para pensar cómo rediseñar el modelo, cómo hacerlo amigable, tal vez más pequeño, con menor margen, pero con mejor experiencia para la gente. De hecho, ahora es cuando se deben hacer eficientes los procesos y dejar la lacra burocrática y entramada del papel como un mal recuerdo del pasado.

Cinco. Vuelve a la esencia de ser humano. He visto tantas empresas y personas colaborar en esta época donde, desde bolsas solidarias hasta pequeñas pero significativas muestras de estar juntos. Cuando salgas, no compares experiencias porque cada quien la vivió a su manera. Más bien, mira dónde puedes llevar un poco de lo que tienes. Vivir en sociedad también es eso y este retorno será una muestra de ello.

Empieza el día uno con ojos nuevos para ver la vida. Verás que otro mundo será posible.