El mes de junio ha sido muy duro para la población cochabambina. Muchos casos de COVID-19  han derivado en  que tengamos que entrar en una una cuarentena rígida que ha tenido un impacto  económico  muy grande en la región, poniendo en riesgo el trabajo de muchas personas.

Esta situación está afectando a todos los empresarios de Cochabamba, a esa emprendedora de la tienda de la esquina, al empresario de la cafetería que no funciona, el contratista de construcción o el taxista. Y es que el tema de la pandemia no discrimina en sector formal  o informal , ni tampoco por el tamaño de empresa.

Se ha determinado que la mayoría de las personas que se contagian no lo hacen en su fuente laboral, si no en reuniones familiares. Esto se debe a que generalmente las personas cumplen las medidas de bioseguridad, barbijo, distancia y lavado de manos periódicamente en sus fuentes laborales donde las empresas están obligadas a cumplir los protocolos de bioseguridad.

Ahora que se ha determinado que las personas mayores de 18 años tienen acceso a la vacuna de COVID, es importante que todas las personas en edad de trabajar se vacunen. De esa manera aseguraremos la bioseguridad de las trabajadores bolivianos permitiéndolo acelerar el proceso de reactivación económica en nuestro país.

El vacunarse es una responsabilidad con la salud de uno mismo, de nuestros familiares y amigos, pero también es responsabilidad con la salud económica de nuestra región. Por eso, a través de esta columna, te invito a que puedas vacunarte y logremos juntos salir adelante.

#ACTUARENVEZDEHABLAR

MANUEL LAREDO GARNICA

Emprendedor Social en Economía Circular

[email protected]