Cada vez estoy más contento del avance que está teniendo el ecosistema de emprendimiento e innovación en Bolivia. Es importante mencionar que casi como todas las cosas que nacen en Bolivia, este ha nacido, ha crecido y se está fortaleciendo sin apoyo de nadie; sin una política pública que la promueva y sin que las cámaras y  empresarios la pongan como su prioridad número uno. Nuestro ecosistema se ha estado desarrollando de forma autónoma, se ha autoorganizado y autocorregido. Ese concepto que nos venden desde Europa como SOCIOCRACIA, es para nosotros el pan de cada dia.

De forma natural, en nuestra sociedad han nacido colectivos como Google Developers Group, quienes en un principio se reunieron en las plazas, programas de Desarrollo de Habilidades STEAM como Peque Innova y Microscopía para todos y la comunidad B de Bolivia, entre otras, que promueven utilizar el mercado para crear desarrollo sostenible, que ya tiene más de 200 personas participantes y no posee un presidente ni un vice presidente. 

En el marco del desarrollo empresarial, iniciativas como Innova Bolivia, Founder  Institute, Pista 8 y Seed Star están creando Startups de tipo tecnológico y buscando el impacto económico, social y ambiental. Estos movimientos son ejemplos de cómo los jóvenes bolivianos, cansados de esperar políticas públicas que promuevan innovación, han logrado generar estructuras que desarrollen y propongan un nuevo paradigma de desarrollo. 

Los colectivos anteriormente mencionados son un pequeño ejemplo de lo que se está moviendo dentro de nuestro país, silenciosamente, sin ningún otro interés que generar un cambio. Por otro lado, están aprendiendo a trabajar colaborativamente y apoyarse unos a otros. Por eso celebro y apoyo a todos los jóvenes bolivianos que han tomado la decisión de ser ciudadanos activos y han dejado de ser simples habitantes.

MANUEL LAREDO GARNICA

Emprendedor Social en Economía Circular

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