Opinión Bolivia

  • Diario Digital | martes, 23 de abril de 2024
  • Actualizado 10:28

El arco religioso en crisis política

El arco religioso en crisis política

Prólogo: El “factor religioso” se hace visible con dos “candidatos-pastores-evangélicos”: Humberto Peinado (fundador y uno de los líderes de la agrupación ultra conservadora Plataforma por la Vida y la Familia), candidato a Vicepresidente por UCS, y Chi Yung, candidato a Presidente por PDC. El segundo más que el primero introduce con éxito el discurso religioso conservador (anti derechos) en la campaña electoral. Confunde las propuestas políticas con el sermón de iglesia, obteniendo el tercer lugar en las elecciones.

Clímax: El “factor religioso” se vuelve crucial en el ciclo de protestas ciudadanas después del 20-O con el liderazgo de Fernando Camacho. El discurso religioso del líder cívico cumplió tres funciones: 1) dio una “certeza de victoria” porque “Dios está de nuestro lado”, 2) reafirmó la identidad del liderazgo cruceño: una patria, una fe (católica), una misma cultura (criolla mestiza), y 3) permitió caracterizar al enemigo: Evo no solo es un “dictador”, sino también un “idólatra” que metió a la Pachamama en Palacio.

La “entrega simbólica” de una Biblia y una carta de renuncia minutos antes de que Evo Morales comunique su renuncia por TV, fue central en la crisis. Se legitimó para gran parte de la población la consigna: “Que la Biblia vuelva a Palacio de Gobierno”.

Desenlace: Esta influencia religiosa tiene su colofón con la (auto) designación como Presidenta Constitucional de Bolivia de Jeanine Áñez, hermana de un pastor evangélico en el Beni y cercana a estas iglesias. Participó como panelista en el Congreso Iberoamericano por la Vida y la Familia en febrero de este año en Panamá. Es un congreso que reúne a la mayoría de organizaciones fundamentalistas ultra conservadoras del continente para coordinar acciones contra los derechos de los GLBT, contra la despenalización del aborto, y contra la educación sexual integral a nivel regional.

Como Fernando Camacho, Jeanine Áñez ingresa a Palacio Quemado con la Biblia en lo alto afirmando: “hoy vuelve la Biblia a Palacio”. En el histórico balcón de Palacio Quemado, con Camacho al lado y con la Biblia en la mano, Áñez dice: “Esta Biblia es muy significativa para nosotros. Nuestra fuerza es Dios, el poder es Dios, que Dios nos bendiga queridos hermanos bolivianos”.