Opinión Bolivia

  • Diario Digital | jueves, 28 de marzo de 2024
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Pandemia financiera y circos

Pandemia financiera y circos
Este domingo, mientras transcurre esta cuarentena, la  preocupación se apodera de mucha gente al ver como se incrementa el número de enfermos y muertos por coronavirus. Hay bastante miedo y estrés por todas partes y en muchos casos, una sonrisa, según la opinión de psicólogos, puede ser el mejor remedio que todos tenemos a mano y sin costo. La risa puede resultar mejor que lavarse las manos en algunos casos, es la mejor forma de relajar el cerebro y es el mejor antídoto contra el encierro que estamos viviendo, por su poder de curación y de dar esperanza. Esto explica porque la redes sociales están llenas de memes y relatos divertidos que tienen que ver con el virus. Y es que la risa desde hace muchos siglos atrás ha funcionado como una catarsis para la humanidad, incluso durante los ahorcamientos en la era medieval o las ejecuciones en el holocausto.
La industria de la risa y la distracción siempre ha estado representada por los circos en el mundo. Todos alguna vez fuimos a un circo y cuando recordamos algunas de sus escenas  nos viene una sonrisa por la experiencia vivida. Juan Pablo II, al referirse a esta industria, decía: “ en un mundo lleno de violencia, pornografía y desastres, el único espectáculo blanco, limpio y puro que va quedando en la Tierra y que reúne a toda la familia es el circo”.
Este próximo 18 de abril, se recordará   el día mundial del circo, sin embargo, hay poco que festejar. En efecto, la anterior semana el presidente de la Asociación de Artistas Circenses de Bolivia hacia un llamado clamoroso a la población pidiendo ayuda porque desde hace varias semanas atrás no tienen clientes por la cuarentena y por eso no tienen ni siquiera para comer.
El problema no es menor, sorprendentemente, existen en el país más de 50 circos que están conformados por más de 100 familias, lo que hace un total de 500 personas entre trapecistas, gimnastas, payasos y anfitriones.
Paralelamente, la anterior semana, por el dia mundial del circo, el Cirque du Soleil lanzó un nuevo espacio web de contenido digital denominado CirqueConnect, que permite a las personas ver espectáculos en directo o grabaciones anteriores. Este circo global  es la más representativa de la industria de la risa por sus espectáculos de altísima calidad y fue por muchos años un referente de innovación gracias al libro  “El Océano Azul”  del autor  Insead Chan Kim, quien destacaba que el Cirque du Soleil había creado un nuevo mercado gracias a un espectáculo innovador sin los animales ni riesgos del circo tradicional y más bien creando shows artísticos con los mejores acróbatas del mundo, mezclado con rasgos propios de la  ópera y los musicales.
Cuando más podríamos estar sonriendo y apoyando a los circos, el coronavirus ha parado la música del espectáculo y ha puesto contra las cuerdas a la industria de la risa, esto debido a que el Cirque du Soleil ha cancelado su shows de las Vegas, de la China y toda su próxima gira, lo que podría provocar su bancarrota  por una rebaja de su riesgo crediticio, según  Moodys, por  sus bonos CLO (collateralised debt obligation) que representan 1.000 millones de euros.
Esta rebaja de estos CLO, del Cirque du Soleil, ha encendido la voz de alarma en Wall Street y se podría dar un nuevo estallido en el mercado de este tipo de bonos por cerca de 650.000 millones de euros, una verdadera pandemia financiera similar a lo ocurrido con las hipotecas subprime de hace una década. Al parecer, la ambición y la innovación financiera nuevamente pondrían ocasionar una nueva crisis o pandemia financiera mundial.  Ante este panorama, económico y de salud,nos hace bien ejercitar una sonrisa recordando la frase de Mark Twain de que “La raza humana tiene un arma verdaderamente eficaz: La risa”.

 

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