Opinión Bolivia

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Lo local y sus saberes

Lo local y sus saberes

Los saberes locales representan conocimientos que no son alterados con el paso del tiempo, se transmiten entre generaciones, formando conocimiento ligado a una sociedad especifica donde se originan desarrollan y sobre todo transmiten. Son basados en supuestos, muy diferentes a las ciencias, generados en comunidades con una amplia relación entre naturaleza e individuos, caso indígenas, campesinas, obreras, etc. Los saberes locales son trascendentales tanto para el desarrollo humano como para la conservación del medio ambiente, los sistemas de producción y la comercialización de la producción familiar. La importancia de los saberes locales tanto para el desarrollo humano como para la conservación ambiental es reconocida desde el Informe de la Comisión Brundtland (1987), ratificado en la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (1992), la Convención sobre la Diversidad Biológica (1992) y en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible Río+20 (2012).

En Bolivia, la vida de las poblaciones rurales, originarias campesinas, depende básicamente de sus saberes locales, herencia de una larga relación que evoluciona constantemente entre la naturaleza y sociedades, donde en el transcurrir del tiempo fueron transformado sus ecosistemas de acuerdo a sus cosmovisiones, valores, prácticas y conocimientos. Se llegó a desarrollar sistemas complejos de manejo de sus recursos naturales que resultaron en altísimos niveles de producción agropecuaria, textil, alimentaria, constructiva  y salud, donde actualmente la seguridad alimentaria y la salud de los pueblos andinos siguen dependiendo de sus conocimientos de predicción del clima, manejo de suelos y de cultivos nativos, así como de la flora y fauna medicinales. Los saberes locales, que constituyen un cuerpo de conocimientos propios, son parte de una identidad cultural, con intercambios y transmisiones a partir  de relaciones de reciprocidad,  reflejando una propia cosmovisión.

Los procesos que actualmente se los conocen como artesanales en las culturas prehispánicas eran pilares para dotar de cobijo y culto a sus pobladores, donde recurrían a la piedra, a la par de técnicas con un buen uso de la tierra y de materiales orgánicos para construir sus viviendas, templos y sitios de adoración. Bolivia tiene regiones en las que se han aplicado técnicas constructivas de carácter sostenible que aprovechan los recursos que le genera su propio entorno. Estas técnicas han sido transferidas de generación en generación hasta nuestros días.

CULTURA, ZOOCIUDAD Y TERRITORIO

JAIME ALZÉRRECA PÉREZ

Docente e investigador IIACH- UMSS

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